El femicidio en Bolivia sigue siendo un delito impune, reveló este miércoles la directora ejecutiva del Centro de Información y Desarrollo de la Mujer (CIDEM), Mary Marca. La representante de la organización gubernamental destaca que de los 345 casos documentados estos cuatro años, el autor sigue libre.

"No hay sentencias, más que detenciones preventivas y desde la detención preventiva presentan todos los recursos para que la retardación de la justicia llegue a su límite y la justicia tiene que decir que salen libres, a eso es lo que apuestan los asesinos", dijo a Erbol la directora,

La noche del lunes de carnaval se registró el asesinato de la periodista Hanali Huaycho, la que recibió presuntamente de su marido, el teniente de policía, Jorge Clavijo, 15 puñaladas, el cual se encuentra prófugo, informa Erbol.

Una ola de protestas se desarrolló en El Alto, la ciudad donde la periodista fue enterrada.

Al número de mujeres asesinadas, en la mayoría de los casos por sus parejas, se suma al creciente problema de las agresiones físicas y sexuales.

Aunque el país registra cerca de 500.000 denuncias de violencia en cinco años, según un comunicado de CIDEM, se destaca que "siete de cada diez mujeres sufren algún tipo de violencia en sus hogares", y "el 75 por ciento de mujeres en situación de violencia reincidente no denuncian".

"Del total de mujeres que declararon haber sufrido violencia en sus hogares, el 53 por ciento no tomó ninguna acción", según datos oficiales, agrega el informe.