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Ratones muertos con paracetamol será desperdigados por la selva de Guam para poder contrarrestar una plaga que ha estado sobre el territorio estadounidense por más de 60 años: la serpiente arbórea marrón.
La gran mayoría de las aves nativas de Guam están extintas debido a esta serpiente, la cual llegó al territorio por medio de los barcos militares luego de la Segunda Guerra Mundial. Según los cálculos, ahora deben existir 2 millones de estos reptiles en Guam, atacando la vida salvaje, mordiendo a residentes e incluso provocando cortes eléctricos al deslizarse por los cables de luz.
"Llevaremos esto a una nueva fase" señaló Daniel Vice, director asistente del Departamento de Agricultura y Servicio de Vida Salvaje de Hawái, Guam y las Islas del Pacífico. "No hay otro lugar en el mundo con un problema de serpientes como en Guam".
La serpiente arbórea marrón tiene generalmente un metro de largo, aunque puede crecer hasta tener más de 3 metros. La mayoría de las aves nativas estaban indefensas frente a este depredador nocturno que repta por los árboles, y luego de un par de décadas de su llegada, acabó con la gran mayoría de los pájaros de la zona. Si bien su veneno es usado para cazar animales, no es letal para los humanos.
La solución que los científicos hallaron para este problema es el paracetamol, un ingrediente activo en los fármacos analgésicos. La estrategia diseñada por los expertos es utilizar dos de las debilidades de la serpiente para así acabar con ella. En primer lugar, la serpiente arbórea marrón come presas que no ha matado, y en segundo lugar, son altamente vulnerables al paracetamol, el cual es inofensivo para los humanos.
Por más de una década, los científicos del gobierno de Estados Unidos con el apoyo del Departamento del Interior y el Departamento de Defensa han estado perfeccionando el lanzar ratones muertos para así acabar con la plaga de serpientes.
Para que los ratones no caigan al suelo y otros animales se intoxiquen, los científicos han diseñado un sistema para que el animal quede enredado en las ramas de los árboles, hábitat de las serpientes arbórea marrón.
De acuerdo a los expertos, el impacto a otras especies será mínimo, particularmente porque las serpientes ya han matado a los pájaros que podrían haber estado en riesgo.
Según señalaron los científicos, el objetivo no es erradicar a las serpientes, sino controlarlas y contenerlas.
El lanzamiento de ratones comenzará en abril o mayo de este año.
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