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Las declaraciones ofensivas de un abogado en Nueva Zelanda para justificar el asalto sexual de su cliente han generado este jueves la queja generalizada de los defensores de las víctimas.


Estas protestas se producen después de que Keith Jefferies, defensor de George Pule, acusado de violación sexual a una chica, argumentara que la víctima podría evitar el hecho simplemente con "cerrar sus piernas".

Ante ello, Natalie Gousmett del Centro de Crisis por Violación Wellington, capital nueva zelandesa, ha lamentado que estas afirmaciones del letrado sean "muy ofensivas y perjudicial para la víctima y su familia".

Este comentario fue "horrible", sería como echar la culpa del asalto sexual a la víctima, ha exclamado Gousmett.

Mientras tanto, Jefferies al admitir que había hecho los comentarios, se ha defendido alegando de que si hubiera habido algo excesivamente malo en lo que dijo, el juez habría protestado al respecto.

El acto delictuoso tuvo lugar el 22 de octubre de 2011, sin embargo, hasta la fecha no se ha dictado sentencia sobre este caso.