Un hombre de 30 años bloqueó la boca de su hijo con un candado porque no paraba de gritar y terminó golpándolo hasta matarlo.
candado
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El nigeriano Chris Elvis creía que su hijo estaba poseído y que era el responsable de la mala racha que estaba atravesando, confesó a la Policía de Lagos, informa Daily Mirror. Elvis, guardia de seguridad de profesión, no podía soportar que el niño no dejara de gritar e intentó callarlo con el candado. Como no lo consiguió le quemó con una plancha por todo el cuerpo, le golpeó y le encerró en un bidón de plástico. La madre del menor regresó de su trabajo en el mercado local y presenció la terrible escena y denunció los hechos ante la policía. Los hechos ocurrieron el pasado 10 de febrero y el niño acabó muriendo debido a la gravedad de las lesiones sufridas.

La Policía considera que el detenido es una persona inestable pero indicó que eso no evitará que sea sometido a juicio. No es el primer caso de un niño asesinado por la creencia de que está poseído. Los líderes religiosos de Nigeria afirman que el demonio toma el cuerpo de los niños muy a menudo y les culpan de los desastres que le suceden a la comunidad. Así, muchos menores han sido bañados en ácido, envenenados o enterrados vivos.