Una niña de tercer curso fue castigada con la expulsión de un colegio en el Distrito Escolar Christina, en el estado de Delaware, por llevar una tarta de cumpleaños y un cuchillo para cortarla, informa la agencia Europa Press.

Después de cortar la tarta, el profesor comunicó al director que la alumna portaba un arma peligrosa, con lo cual el colegio decidió denunciarla a las autoridades y expulsarla por un año.

Aunque la expulsión al final no se ha realizado, el incidente pone la atención en la ley estatal de tolerancia cero de armas en los colegios, la cual permite este tipo de decisiones. Según dicha ley, se puede "sancionar cualquier quebrantamiento de la misma sin importar las circunstancias, la ignorancia o los errores accidentales", explica la agencia.