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© ArchivosAbdullah Gül , el Presidente de Turquía y fiel seguidor de los intereses de EE.UU y la OTAN.
El Gobierno de Turquía ha incluido este lunes a seis personas, incluido el portavoz del grupo extremista suní Estado Islámico, Abu Muhamad al Adnani, en su lista de sanciones por terrorismo, según ha informado el diario turco 'Hurriyet'.

Las sanciones, aplicadas al hilo de la decisión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, implican una prohibición de viaje internacional para los afectados, la congelación de sus fondos y un embargo de armas.

La decisión de Ankara tiene relevancia debido a que la formación yihadista tiene en su poder a 49 personas que secuestró el 11 de junio en el consulado turco en la localidad iraquí de Mosul, entre las que hay 46 ciudadanos turcos.

El avance del Estado Islámico en el norte de Irak ha alarmado al Gobierno de la capital y a los aliados occidentales, lo que ha provocado el lanzamiento de decenas de ataques aéreos por parte de Estados Unidos con el objetivo de frenar el avance de los milicianos y acabar con el Estado Islámico.

El Estado Islámico es una organización yihadista nacida en Irak y relacionada --aunque no vinculada-- con la red terrorista Al Qaeda. Con la sublevación en 2011 contra el régimen del presidente sirio, Bashar al Assad, el grupo penetró en Siria y desde allí ha lanzado en las últimas semanas una ofensiva que le ha permitido hacerse con el control del norte y el oeste de Irak.

El ISIS proclamó a finales de junio el Califato Islámico y nombró califa a su líder, Abú Bakr al Baghdadi. La nueva organización se declara Estado independiente y reclama que todos los musulmanes del mundo le juren fidelidad.

Desde entonces, ha lanzado numerosas campañas de venganza contra la comunidad chií y otras comunidades minoritarias de las zonas que controla, como la cristiana y la yazidí, ejecutando a miles de personas y destruyendo numerosos lugares de culto.