El Comité Científico de Monitoreo Permanente del volcán Ubinas, recomendó elevar el nivel de alerta de este macizo al color naranja, ante el incremento de su actividad, que se prevé se caracterizará por la continuación de explosiones y exhalaciones en los siguientes días.

volcán ubinas
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Las explosiones registradas en el volcán, que ya suman 8 en los últimos 9 días, fueron precedidas por emisiones de ceniza y gases volcánicos que se elevaron entre los 1,500 a 3,500 metros sobre la cima del volcán, afectando un radio de 15 kilómetros.

La caída de estas cenizas podría generar efectos negativos en la salud de las personas, así como la actividad agrícola y ganadera.

Los episodios explosivos presentaron valores moderados de energía. En general, la energía total diaria acumulada en este periodo no experimentó mayor variación, manteniéndose constante desde el 8 de abril.

Asimismo, los valores del promedio de flujo diario (500 Tn/día) de SO2 del volcán Ubinas, que ya venían con tendencia al alza desde inicios de marzo, han seguido aumentando gradualmente hasta alcanzar un pico de 4200 Tn/dia el 15 de abril.

Por otro lado, se han detectado importantes incrementos en la relación de sulfatos-cloruros SO4/Cl (gases netamente volcánicos) en las fuentes termales asociadas al volcán.

En este periodo de monitoreo, no se han reportado anomalías térmicas ni de deformación en el volcán Ubinas.

El comunicado emitido por el Observatorio Vulcanológico del Sur del IGP y por el Observatorio Vulcanológico del Ingemmet, recuerdan que los días 12 y 13 de abril, se observó el descenso de numerosos lahares por las quebradas del flanco sur del volcán, los cuales discurrieron hasta distancias de 10 kilómetros. Estos flujos de ceniza, lodo y fragmentos rocosos causaron algunos daños en sembríos y carreteras de la zona.

Por lo expuesto, los especialistas recomendaron mejorar las acciones de preparación y respuesta frente a un probable incremento de la actividad eruptiva del Ubinas.

Además, evaluar de forma permanente el impacto de las caídas de ceniza en la salud de las personas, las fuentes de agua, la actividad agrícola y ganadera, así como implementar acciones de mitigación efectivas.

En caso de presentarse nuevas precipitaciones pluviales o nieve en la zona, se recomienda a los pobladores del valle de Ubinas mantenerse alejados del curso de las quebradas y ríos que descienden del volcán, ante la posibilidad de ocurrencia de nuevos flujos de lodo.

De igual modo, los expertos aconsejan mantener habilitados los refugios de evacuación construidos el 2006; y complementariamente evaluar la implementación de nuevos albergues pero en zonas de bajo peligro volcánico y a más de 15 kilómetros de distancia del volcán.