Según un comunicado del RKI, se puede descartar que el virus haya sido transmitido por un mosquito, debido a la estación del año y a la zona geográfica.
© REUTERS/Josue Decavele
La institución señala que la persona afectada es una mujer que mantuvo relaciones sexuales con su pareja sin protección.
El hombre estuvo a principios de abril en Puerto Rico y tras su regreso a Alemania comenzó a presentar síntomas propios de una infección por el virus del Zika, explica el escrito.
La mujer, que desde mediados de enero de 2016 no había estado en ninguna región donde está extendido el virus, desarrolló síntomas de contagio dos semanas después que su pareja, añade la nota del instituto.
El comunicado apunta que la confirmación la realizó el Instituto de Medicina Tropical Bernhard Noche, el cual detectó en una prueba de orina el genoma del zika, además de constatarse la presencia de anticuerpos.
La Organización Mundial de la Salud informó la víspera que 58 países y territorios están afectados por el virus del Zika, vinculado con la microcefalia y el Síndrome de Guillain-Barré (SGB).
Esas naciones hasta el martes reportaban casos de zika, por la transmisión continua del mosquito del género Aedes aegypti, portador también del dengue y chikungunya, dijo la agencia de la ONU.
Por el brote del zika en América del Sur, la OMS declaró el pasado 1 de febrero una emergencia de salud internacional ante la sospecha de que el virus podría provocar microcefalia o SGB.
La microcefalia una condición en que los bebés nacen con cerebros más pequeños de lo habitual. Por su parte, el SGB es una enfermedad en la que el sistema inmunológico de una persona ataca a los nervios periféricos.
El organismo recordó que para hacer frente al virus la única estrategia sigue siendo la prevención y control global, que abarque la vigilancia de los casos, actividades de respuesta e investigación.
El zika se detectó por primera vez en África en 1947. En América brotó el pasado mes de mayo en Brasil, donde se reportaron cerca de cuatro mil casos de microcefalia. La OMS estima que puede infectar hasta cuatro millones de personas en la región.
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