Primero, Occidente intentó destruir la economía rusa, imponiendo sanciones, después arremetieron contra los atletas del país eslavo, incluyendo los paralímpicos, constata el artículo publicado por el diario Argumenti i Fakti.
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© Sputnik/ Maxim Blinov
¿Por qué nuestros "socios" occidentales se portan así? Los expertos, citados en el artículo, intentan explicar por qué Occidente no quiere entender al país eslavo ni aceptarlo.

Rusia le dice no al mundo unipolar

"Cuando Putin llegó al poder, al principio, trató de mejorar las relaciones con Occidente y, sobre todo, con EEUU. Les extendió su mano, pero le dieron a entender que no la necesitaban", recuerda el analista político ruso, Vladímir Pózner, citado en el medio.

Sin embargo, en 2007, el presidente ruso pronunció su famoso discurso en Múnich en la conferencia de seguridad, donde declaró que Rusia no reconoce la existencia de un mundo unipolar y que el mundo es multipolar, añadiendo que Moscú tiene sus propios intereses nacionales, y que los demás tienen que tomarlo en cuenta.


Comentario: No podemos olvidar que Rusia intercedió por Siria ante la ONU para evitar el primer intento de la coalición Occidental - encabezada por EEUU - para invadir ilegalmente Siria bajo el pretexto de que el presidente Asad había usado armas químicas. Hasta ahora sabemos que fueron los mismos "rebeldes moderados" (entiéndase: Terroristas patrocinados por EEUU) los que usaron las armas prohibidas para después culpar a Asad. Esta es una estrategia estadounidense bastante vieja, perpetrar un ataque por medio de terceros patrocinados para culpar a lo que ellos consideran como el verdadero enemigo. Un ejemplo muy claro y reciente de esto fue el ataque al convoy de ayuda en Alepo. Toda la evidencia apunta a EEUU y a sus terroristas a control remoto, pero no dudaron ni un segundo para culpar a Rusia.

Rusia representa una política externa y valores opuestos a los de EEUU y sus aliados sionistas, y ello también representa una amenaza a su hegemonía patológica.


"Ese fue el momento cuando se originó la actitud que vemos hoy en día. La rabia de Occidente y, en particular, de EEUU, proviene del hecho de que no quieren admitir que el país, considerado vencido, volviera a la política internacional", explica Pózner.

El politólogo precisó que habla todo el tiempo de EEUU, porque "Europa adoptó el punto de vista estadounidense" y no se pronuncia en contra del país norteamericano.


Comentario: Uno de los temores más grande de EEUU, es que la UE amplíe la cooperación con Rusia. De hecho, varios analistas geopolíticos ven los recientes ataques terroristas en Europa -como en Francia y Alemania-, como una amenaza para que estos países no estrechen lazos con Rusia, y se alineen a los preceptos patológicos estadounidenses.


Además, Putin afirmó que Rusia no iba a tolerar la expansión de la OTAN y el acercamiento de la Alianza a sus fronteras.

"Una de las mentes más brillantes de EEUU, George Kennan —autor de la política de contención de la Unión Soviética— catalogó de crimen y enorme error la decisión del presidente Clinton de ampliar la OTAN en 1998, advirtiendo que, al final, Moscú va a reaccionar de una manera que no le va a gustar a EEUU. Aquí es donde se encuentran las razones de unas relaciones complicadas entre Rusia y Occidente", sostiene el analista ruso.

El efecto de la guerra mediática

Asimismo, Pózner destaca que las relaciones entre las poblaciones de distintos países son resultado de la deliberada distorsión de los hechos por los medios. Esta opinión la comparte también Ígor Beloboródov, demógrafo y sociólogo ruso.

"Durante siglos, Occidente ha hecho una guerra mediática contra Rusia. A los pueblos europeos los asustaban, asegurando que los rusos somos extremadamente salvajes, capaces de hacer todo lo peor. Los mitos acerca de los osos en la Plaza Roja existen todavía", señala el demógrafo.

​Además, el experto destaca que Rusia es "un país con un alto sentido de la justicia. La mentalidad occidental con su prioridad de practicidad presupone siempre un poco de negociabilidad, voluntad de compromiso sin tomar en cuenta las barreras éticas. Nosotros, por el contrario, siempre hemos seguido el principio: hay cosas que no pueden ser objeto de negociación", explica Beloboródov.

​En cuanto a los medios rusos, Margarita Simonián, redactora jefe de la cadena RT y la agencia de noticias estatal Rossiya Segodnya, la cual incluye a Sputnik, comenta que "en el Congreso de EEUU casi todos los meses discuten cómo luchar contra los medios rusos, la OTAN tiene grupos enteros para luchar contra la denominada propaganda rusa".

Sin embargo, Simonián no cree que la gente en Occidente odie a Rusia.

"La imagen negativa se impone por los políticos y los medios de comunicación que pintan una historia de terror, una imagen de un enemigo que hay que combatir".