Hace seis años, un equipo de submarinistas descubrió las más antiguas nasas estacionarias para pescar del norte de Europa junto a las costas del sur de Suecia.

Recientes descubrimientos apuntan a una pesca masiva, y por lo tanto a un asentamiento semi-permanente.
© Arne SjöströmRecientes descubrimientos apuntan a una pesca masiva, y por lo tanto a un asentamiento semi-permanente.
Desde entonces, los investigadores de la Universidad de Lund (Suecia) consiguieron hallar un asentamiento de la Edad de Piedra excepcionalmente bien conservado.


Ahora creen que esta localización constituía un ecosistema similar a una laguna o albufera en la que el ser humano del Mesolítico vivía en algunas épocas del año.

Entre otros espectaculares hallazgos se ha encontrado una piqueta de hace 9.000 años hecha con una cornamenta de alce. Estos descubrimientos revelan una pesca masiva, y por lo tanto un tipo de asentamiento semi-permanente.
"Como geólogos, queremos recrear esta zona y comprender qué aspecto tenía. ¿Era fría o cálida? ¿Cómo cambió el entorno con el paso del tiempo?", plantea Anton Hansson, estudiante de doctorado de Geología Cuaternaria en la Universidad de Lund".
Las variaciones en el nivel del mar han permitido que estos elementos se conservaran en las profundidades de la bahía de Hanö, en el mar Báltico.

Los investigadores han perforado el lecho marino y han realizado una datación de radiocarbono de su fondo, examinando además pólenes y diatomeas. Han trazado asimismo un mapa batimétrico donde han quedado registradas las variaciones de profundidad.
"Estos yacimientos son conocidos desde hace tiempo, pero únicamente gracias a hallazgos dispersos. Ahora disponemos de la tecnología necesaria para llevar a cabo una interpretación más detallada del entorno," apunta Anton Hansson, añadiendo a continuación que "Si queremos comprender plenamente cómo el ser humano se extendió desde África, además de su modo de vida, tendremos que descubrir también todos sus asentamientos.
Bastantes de ellos se encuentran actualmente sumergidos, ya que el nivel del mar es más alto a día de hoy que durante la última glaciación. El ser humano siempre ha preferido las zonas costeras".