Embriólogos de EE.UU. marcaron un hito histórico: por primera vez, modificaron exitosamente los genes de un feto humano, para borrar defectos.
© Desconocido
Científicos de la Universidad de Salud y Ciencia de Oregón (Oregon Health and Science University, noroeste de EE.UU.), en colaboración con el Instituto Salk de Estudios Biológicos en La Jolla, California, y el Instituto de Ciencias Básicas de Corea, consiguieron introducir en las células reproductoras, una herramienta molecular que acabó borrando y reemplazando los genes defectuosos de un embrión recién formado, sin causar daños al resto del genoma.
La mecánica con que el experimento, Shoukhrat Mitalipov, de la Universidad de Ciencia y Salud de Oregón, se llevó a cabo es la siguiente:
El equipo científico introdujo dentro del genoma, además de las tijeras, componentes de edición, el esperma de un hombre con el defecto genético, durante el proceso de fertilización in vitro. Los científicos hallaron que
el embrión usó la copia saludable disponible del gen para reparar la parte mutada.
Además, verificaron que su corrección del gen no causó ninguna mutación en otras partes del genoma, una de las preocupaciones principales en la edición genética. No obstante,
esta técnica tiene aún muchos interrogantes al frente y la comunidad científica la ha acogido con cautela.
El gen modificado en este estudio era portador de la cardiomiopatía hipertrófica. Esta enfermedad cardíaca hereditaria, puede provocar la muerte súbita. La aplicación práctica más importante para la nueva tecnología, podría ser corregir mutaciones genéticas en bebés cuando aún están en el útero o poco después de nacer. También serviría para producir bebés genéticamente modificados, con el objetivo de elegir el color de sus cabellos o aumentar su fuerza física.
Comentario: No es sorprendente que se pida cautela ante semejante tecnología, ya que, las implicaciones son numerosas y las consecuencias son, en gran medida, difíciles de predecir. Ya hemos visto como la biotecnología ha trabajado sin tener en cuenta que aún hay mucho que desconocemos acerca del código genético y las diferentes interacciones que se pueden dar entre organismos genéticamente modificados y el entorno. Cuando "jugamos a ser Dios" sin tener el conocimiento y la sabiduría requeridos para ser realmente responsables de tal poder, podemos llegar a cometer muchos errores irreparables que dañarían profundamente a la sociedad y al planeta. No se trata de ir en contra del desarrollo tecnológico, sino simplemente ir con mucha precaución, buscando, sobre todo, evitar los daños potenciales.
Comentario: No es sorprendente que se pida cautela ante semejante tecnología, ya que, las implicaciones son numerosas y las consecuencias son, en gran medida, difíciles de predecir. Ya hemos visto como la biotecnología ha trabajado sin tener en cuenta que aún hay mucho que desconocemos acerca del código genético y las diferentes interacciones que se pueden dar entre organismos genéticamente modificados y el entorno. Cuando "jugamos a ser Dios" sin tener el conocimiento y la sabiduría requeridos para ser realmente responsables de tal poder, podemos llegar a cometer muchos errores irreparables que dañarían profundamente a la sociedad y al planeta. No se trata de ir en contra del desarrollo tecnológico, sino simplemente ir con mucha precaución, buscando, sobre todo, evitar los daños potenciales.