Fotografías de extrañas nubes apocalípticas comenzaron a aparecer en Instagram, y en un principio parecían que habían sido alteradas digitalmente en Photoshop para que pareciera que el fin del mundo estaba cerca.
nubes georgia
Sin embargo, como más fotos de este tipo comenzaron a aparecer se hizo evidente que eran reales y la gente entró en pánico.

Las fotografías fueron tomadas en Hinesville, Georgia, EE. UU., el 31 de agosto de 2017, y despertaron temores de que estaba llegando el fin del mundo.

(¡Esto es real!, exclama la persona que está filmando estas amenazadoras nubes. ¡Parece sacado de una película de terror!)

Las nubes eran espeluznantes y negras en la base, y de color gris blanquecino en la parte superior, con mechones que caían haciéndolas parecer como una gigante ola de mar que venía sobre las casas que estaban debajo.

Serían el tipo de nubes que verías sepultar una ciudad en una película de terror acerca del fin del mundo, o sobre un misterioso desastre a punto de suceder.

Estas nubes son conocidas como 'muro de nubes' o 'nubes rodillo'. Son una formación horizontal de nubes bajas que se ve junto a una nube del tipo cúmulo nimbus.

El cumulo nimbus arcus (o cumulonimbus) , es de las nubes de tormenta más extrañas que existen, y crean esa especie extraña de cielo.

En general «los cumulonimbos son nubes de gran desarrollo vertical, internamente formadas por una columna de aire cálido y húmedo que se eleva en forma de espiral rotatorio. Su base suele encontrarse a menos de 2 km de altura mientras que la cima puede alcanzar unos 15 a 20 km de altitud».

Son nubes asociadas con tormentas eléctricas e intensas lluvias, y ráfagas de vientos muy fuertes.

La nube arcus es el tipo de nube que tal vez muchos directores de películas apocalípticas y de terror han utilizado como escenarios en sus películas para que parezca el fin del mundo o que los alienígenas acaban de aterrizar en nuestro planeta.

Sin embargo, más allá del susto inicial, el misterio de estas nubes fue otro gran magnífico espectáculo que nos ofreció nuestra Madre Naturaleza.