El presidente ruso, Vladimir Putin, firma un decreto que impone sanciones a Corea del Norte por las pruebas nucleares que realiza el país asiático.
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El decreto ejecutivo de este lunes pretende aplicar la resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) sobre las medidas económicas especiales, en una respuesta a las pruebas de misiles de Pyongyang a finales de 2016.

El decreto, de casi 40 páginas, especifica algunas de las medidas aprobadas por Rusia en 2007, en relación con las del 14 de octubre de 2006 del CSNU, en particular incluye los nombres de 11 ciudadanos y 10 entidades legales asociados con el programa nuclear de Pyongyang a los que se aplican las restricciones.

El documento también contiene una lista de materiales, tecnologías y productos que está prohibido suministrar a Corea del Norte y presupone la suspensión de la cooperación científica rusa con ese país asiático. El decreto apostilla que "la cooperación científica y técnica con personas o grupos que representen a Corea del Norte debería ser suspendida"

La medida se produce después de que una delegación norcoreana que llegó a San Petersburgo en el marco de la 137 Asamblea de la Unión Interparlamentaria (IPU, en inglés) haya rechazado este lunes negociar con Corea del Sur para tratar la tensión que se vive en la península coreana donde podría estallar una guerra en cualquier momento.

Y después de un reciente intercambio de palabras en la guerra verbal entre el aliado de Seúl, es decir EE.UU., y Corea del Norte, mientras existen preocupaciones más reales de una confrontación militar entre las partes, o peor una guerra nuclear.

"Fue EE.UU. el que motivó a Corea del Norte a crear una bomba de hidrógeno", ha denunciado este lunes el jefe de la delegación norcoreana, Ahn Dong-chun.