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Los plaguicidas y herbicidas de Monsanto, que se usan para tratar los organismos genéticamente modificados (OGM), están apareciendo en cantidades significativas en el agua de lluvia, pozos de agua, e incluso en la leche materna, según una nueva investigación realizada en Brasil. Particularmente entre los residentes que viven cerca de grandes monocultivos, la investigación revela que el 100 por ciento de mujeres con resultados positivos tienen por lo menos una sustancia química en la leche materna, proveniente de los agroquímicos y muy superior a lo permitido en la leche de vaca.

En 2006, un accidente con un avión utilizado para la fumigación contaminó a toda la ciudad brasileña de Lucas do Rio Verde, con niveles incalculables de productos agroquímicos tóxicos. Los residentes de esa ciudad ya están expuestos a más de 35 litros de agroquímicos en un año, pero durante ese año en particular, los residentes fueron expuestos a una cantidad aún mayor.

De acuerdo con una investigación de la Universidad Federal de Mato Grosso do Sul, una muestra de leche materna de 62 mujeres reveló que todas estaban contaminadas con al menos un producto químico peligroso. Cada muestra también dio positivo por DDE, un metabolito del pesticida DDT, que ha sido prohibido en Brasil desde hace más de una década. Otros productos químicos detectados en la mayoría de las muestras son organoclorados, extremadamente tóxicos.

Según Danielly Palma, el investigador principal, que trabajó en el estudio, el 44 por ciento de las muestras de leche materna contiene beta-endosulfán, un insecticida químico conocido por causar daño al sistema nervioso central, sistema inmunológico y el sistema respiratorio. Treinta y siete por ciento de las muestras dieron positivo para la deltametrina, otro insecticida altamente tóxico que se conoce por causar un daño grave prenatal.

En general, el estudio muestra claramente cómo los productos químicos industriales generalizada la agricultura están en el medio ambiente y las poblaciones. Simplemente, no hay duda de que la masiva fumigación de agroquímicos OMG está afectando a los seres humanos de manera significativa y alarmante.