El miércoles, Elon Musk tuiteó un vídeo en el que se le ve entrando en la sede de Twitter en California, llevando un lavabo mientras bromeaba en la plataforma de redes sociales: "¡que se hunda!"
El multimillonario tiene grandes planes para la plataforma. Según un informe, Musk se plantearía recortar la plantilla hasta en un 75 por ciento.
Musk se ofreció a comprar Twitter en abril, pero unos meses más tarde trató de poner fin a la adquisición debido a las preocupaciones sobre el número de cuentas "bot" en la plataforma, lo que dio lugar a una batalla legal entre él y la empresa.
A principios de este mes, Musk anunció que seguiría adelante con la oferta original.
El Tribunal de la Cancillería de Delaware ha dado a Musk hasta el 28 de octubre para cerrar el acuerdo, de lo contrario, el asunto irá a juicio en noviembre.
Según Fox News, en la presentación de beneficios de Tesla la semana pasada, Musk dijo que estaba "entusiasmado con la situación de Twitter".
"Creo que es un activo que ha languidecido durante mucho tiempo pero que tiene un potencial increíble", añadió. "Aunque obviamente yo mismo y los otros inversores estamos pagando demasiado por ella ahora mismo, el potencial a largo plazo de Twitter en mi opinión es un orden de magnitud mayor que su valor actual".
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