Según ha publicado WSWS.ORG (World Socialist Web Site), las muertes maternas en Estados Unidos han aumentado un 40% el último año, según un informe realizado por el Centro Nacional de Estadística de Salud de los CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades).
mortalidad materna
La cifra de muertes maternas aumentó, de 754 en 2019 a 861 en 2020, y 1.205 en 2021.

Niveles de hace 50 años

La tasa de mortalidad materna, de 32 por cada 100.000 nacimientos, ha vuelto a los niveles del año 1965.

Según los datos reflejados en el informe, «las mujeres que dan a luz hoy en EEUU tienen casi cuatro veces más de probabilidades de morir que sus propias madres«. La tasa de mortalidad materna tocó fondo (6,6 por 100.000 nacimientos) en 1987. Se mantuvo por debato de 10 entre los años 1978 y 2002 y después comenzó a aumentar poco a poco, duplicándose en 2017. Se disparó durante la pandemia del Covid-19, casi duplicándose otra vez.
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¿Cuál es la causa?

Según WSWS.org, el principal problema se encuentra en el sistema sanitario con fines de lucro, que «niega un tratamiento prenatal y posparto adecuado a millones de mujeres, simplemente por ser pobres o carecer de seguro médico».

Se apunta en la publicación que Estados Unidos tiene las peores cifras entre los países industrializados en términos de mortalidad materna. Dar a luz en EEUU conlleva un riesgo cuatro veces mayor de morir que en Alemania, Francia o Reino Unido y 10 veces mayor que en Holanda y los países escandinavos. El riesgo es dos veces mayor que en China.

Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), las diferencias ya existían antes de la pandemia del Covid-19, las cifras han ido aumentando en EEUU un 78% entre 2000 y 2020, mientras caía en la mayoría de países.

Los CDC apuntan a causas concretas de la muerte de las madres: la mayoría por origen cardiovascular, que representa el 11%. Los coágulos sanguíneos, 9%. La hipertensión, 8%. El ictus, 7% y otras afecciones cardiacas, un 15%.

Las infecciones y hemorragias posparto suponen un 24%. Los problemas de salud mental, donde se incluyen la sobredosis de dogas y la depresión posparto.

Sin embargo, como apunta la publicación, las estimaciones de los CDC y de otras autoridades sanitarias, señalan que el 80% de estas muertes son evitables con el tratamiento adecuado. Pero muchas mujeres embarazadas y, especialmente, muchas más durante las semanas y meses posteriores al parto no reciben los tratamientos adecuados.

Causas de la falta de atención médica

La falta de atención médica tendría dos causas básicas: las mujeres de las zonas rurales viven a menudo en «desiertos obstétricos», a más de 40 kms de distancia de una unidad de parto. Según los CDC, dos millones de mujeres en edad fértil vive en estas condiciones en EEUU. La situación se ha visto agravada por la reducción de atención sanitaria en las zonas rurales en los últimos años.

La otra causa se encuentra en el aumento de la pobreza y del aislamiento social en la sociedad estadounidense, hasta el punto de que las mujeres urbanas y suburbanas, que viven a pocos kilómetros, e incluso a pocas manzanas de un hospital, no pueden acceder a la atención que necesitan porque carecen de seguro médico y no pueden pagar los gastos de un parto.

Estas dos causas explican por qué las estadísticas son más preocupantes en estados del sur, donde hay más poblaciones rurales empobrecidas, como sucede en Luisiana, Georgia, Alabama, Arkansas, Misisipi y Texas.

Los CDC señalan también a la diferencia racial en el impacto de la mortalidad materna: las mujeres negras han tenido una tasa de mortalidad de 69.9 por cada 100.000 mientras las mujeres blancas se encuentran en el 26,6 y las hispanas en el 28. Sin embargo, durante la pandemia, las muertes de las mujeres blancas e hispanas se ha disparado también.