Con este hallazgo astronómico se comprende el ciclo de vida de las estrellas dentro de las nebulosas oscuras, densas nubes de gas y polvo frío que ocultan la luz. Estas revelaciones resultan fundamentales para explicar los procesos asociados a la formación de las galaxias.
© ALMA (ESO/NAOJ/NRAO), Y. Tamura et al.La galaxia observada se encuentra a 13.200 millones de años luz.
Un equipo internacional de astrónomos, encabezado por
Yoichi Tamura, de la Universidad de Nagoya, ha logrado captar
imágenes de alta resolución de una antigua galaxia que existía apenas 600 millones de años después del
Big Bang.
Estas imágenes de radio, obtenidas con el
telescopio ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array, en Chile), han arrojado luz sobre
estructuras nunca antes vistas, formadas por la interacción de nebulosas oscuras y de emisión.
Las observaciones pintan un tapiz cautivador en el que estas nebulosas se fusionan para
formar una cavidad gigantesca que recuerda a una "superburbuja", en las palabras de presentación del descubrimiento por parte de ALMA. Se cree que esta superburbuja se formó por el nacimiento de estrellas vibrantes y las subsiguientes ondas de choque creadas por las explosiones de supernovas.
Estas revelaciones son fundamentales para comprender los procesos asociados
a la formación de las galaxias y los ciclos de nacimiento y muerte estelar.
El recorrido de la investigaciónEl equipo comenzó su exploración pionera de
galaxias ultradistantes con ALMA en 2012 y logró un gran avance en 2016 al detectar ondas de
radio de oxígeno en una galaxia situada a una distancia récord. Siguieron superando los límites e identificaron la galaxia más distante jamás conocida al detectar ondas de radio emitidas por oxígeno a 13.280 millones de años luz en 2018.
En 2019, los investigadores perfeccionaron sus descubrimientos al detectar ondas de radio emitidas tanto por oxígeno como por polvo en otra galaxia llamada
MACS0416_Y1, ubicada a 13.200 millones de años luz.
La detección de
polvo en el universo temprano, donde el ciclo de reencarnación de las estrellas aún no se había repetido ampliamente, fue un hallazgo destacable en nuestra comprensión del cosmos.
Uno de los descubrimientos más notables de estas observaciones es la presencia de
nebulosas oscuras en el universo primitivo. Estas nubes de polvo frío y gas son densas y ocultan la luz de las estrellas, para las cuales también sirven de crisol donde nacer.
Las intrincadas observaciones del equipo revelan el ciclo vital dentro de las nebulosas oscuras:
las estrellas nacen, viven y mueren, dando lugar a otras nuevas. En su esfuerzo más reciente, el equipo de investigación logró imágenes de alta resolución sin precedentes de MACS0416_Y1.
Una cavidad colosal en el centro de la galaxiaAl configurar las antenas de ALMA como un objetivo zoom y emplear una exposición de 28 horas de duración, los expertos fueron capaces de discernir
los orígenes de las ondas de radio emitidas por el polvo y el oxígeno, lo que muestra cómo las nebulosas de emisión y las nebulosas oscuras están estrechamente entrelazadas, cada una creándose su propio espacio.
Esta especie de danza es indicativa de un proceso en el que las nuevas estrellas nacidas dentro de las nebulosas oscuras
ionizan el gas circundante.
Además, las imágenes revelan
una cavidad colosal, de aproximadamente 1 000 años luz, en el centro de la galaxia, que posiblemente sea
una superburbuja. Estudios anteriores indicaban que MACS0416_Y1 estaba
produciendo estrellas a un
ritmo asombroso, unas cien veces
superior al de la Vía Láctea.
Este ritmo frenético de formación estelar probablemente condujo a la creación de esta superburbuja mediante explosiones consecutivas de supernovas.
El equipo también pudo analizar el movimiento del gas en el interior de las nebulosas, descubriendo que se encuentra en
un estado turbulento, con velocidades que alcanzan los 200 000 kilómetros por hora.
"En condiciones tan revoltosas, se sugiere que las estrellas pueden formarse como
cúmulos masivos", señala el profesor Tamura. Además, añade que estos cúmulos estelares son característicos de las galaxias del universo primitivo.
Takuya Hashimoto, de la Universidad de Tsukuba, elogia el rendimiento de ALMA: "Equivale a capturar la luz extremadamente débil emitida por dos luciérnagas situadas a tres centímetros de distancia en
la cima del Monte Fuji visto desde Tokio, y ser capaz de distinguir entre esas dos luciérnagas".
"La importancia de este estudio radica en sacar a la luz
el máximo rendimiento de ALMA, lo que permitirá comprender la formación de las primeras galaxias, la vida y muerte de las estrellas y el ecociclo de la materia en el universo", concluye el astrónomo.
¿Dónde está toda la vida que debería haber en el universo? Es una pregunta inteligente, con una respuesta tan fácil que ofende y provoca que la gente e incluso los mismos científicos adoctrinados no la acepten. La respuesta, es que el universo que creemos ver, sin vida, es falso.
Equivale a la paradoja de La Luna. Sus características son imposibles, y preguntarse porqué existe La Luna, también es una pregunta inteligente con una respuesta fácil pero que espanta: Alguien puso allí La Luna para joder este planeta.
Por eso ahora ignoro toda la alta astronomía y su contubernio de complicaciones. La verdad siempre es simple, y las mentiras son complicadas. Lo hemos aprendido de una forma muy dura ¿no?