En una reciente entrevista con el periodista Ross Coulthart en NewsNation, el informante OVNI del Pentágono David Grusch lanzó declaraciones bomba sobre el fenómeno OVNI o FANI, afirmando que Estados Unidos y otros gobiernos mundiales han recuperado naves intactas y parcialmente intactas de Inteligencia No Humana (NHI por sus siglas en inglés). Aún se desconoce el origen y la razón de estos accidentes, pero Grusch postuló que ciertas NHI, comúnmente asociadas a avistamientos ovnis, podrían proceder de planos de existencia de dimensiones superiores.
El Dr. Jacques Vallée con el Dr. Allen J Hynek durante el Proyecto Libro Azul
Grusch hizo significativas aserciones en relación con la NHI, afirmando que estas entidades podrían ser extraterrestres o interdimensionales, o posiblemente ambas cosas. Describió avistamientos y recuperaciones de múltiples naves operativas de diversos tamaños, incluida una tan grande como un campo de fútbol. De forma alarmante, reveló la recuperación de cuerpos de NHI e insinuó posibles acuerdos formales entre el gobierno estadounidense y algunas facciones de NHI.
Grusch no es el único en suponer que los ovnis son quizá entidades interdimensionales o de dimensiones superiores, y esta teoría ha sido bien respaldada por otros. La hipótesis extraterrestre ha seguido siendo la principal explicación de los ovnis para muchos expertos. Sin embargo, hay muchos ufólogos que la han abandonado en favor de la hipótesis interdimensional.
El investigador de lo paranormal Brad Steiger escribió:
"Estamos ante un fenómeno parafísico multidimensional que es en gran medida autóctono del planeta Tierra".El astrónomo e investigador OVNI Jacques Vallée afirma que los ovnis y los sucesos relacionados de naturaleza paranormal implican visitas de otras "realidades" o "dimensiones". La idea propone que estas realidades alternativas existen de forma separada pero paralela a la nuestra. En The Edge of Reality, de 1975, Vallée y Hynek consideraron la posibilidad de lo que ellos llaman "universos entrelazados".
Hynek especuló con la posibilidad de que existieran universos alternativos con diferentes reglas cuánticas o velocidades de vibración. Sugirió que nuestro continuo espacio-tiempo podría ser una mera porción de un universo con muchas más dimensiones. Haciendo una analogía, lo comparó con el reto de convencer a un aborigen de que las imágenes de la televisión estaban pasando por la habitación en ese mismo momento. Del mismo modo, propuso que los universos entrelazados podrían existir aquí mismo junto al nuestro, desafiando la noción de que estuvieran situados en otro lugar.
En el libro de Vallée "Pasaporte a Magonia: Sobre ovnis, folklore y mundos paralelos", publicado en 1969, Vallée propuso la idea de un universo paralelo que coexiste con el nuestro. Reiteró este concepto en escritos posteriores, en los que esbozaba sus objeciones a la hipótesis del origen extraterrestre de los objetos voladores no identificados (OVNI). Estas objeciones incluían la abundancia de encuentros cercanos inexplicables que excedían los requisitos de un reconocimiento físico de la Tierra, la improbable estructura corporal humanoide de los supuestos "alienígenas" para los viajes interestelares, el comportamiento contradictorio reportado en los relatos de abducción, la evidencia histórica de fenómenos OVNI a lo largo de la historia humana registrada, y las sugestivas habilidades de los ovnis para manipular el espacio y el tiempo, insinuando posibilidades alternativas.
Un estudio publicado en ResearchGate propone la existencia de una membrana interdimensional que actúa como barrera entre dimensiones, con entradas inestables en forma de túneles interdimensionales. Estos túneles vagarían de forma impredecible entre hipersuperficies, y cualquiera que quedara atrapado en su entrada podría potencialmente viajar a dimensiones más allá de la cuarta, tal y como permiten las leyes de la física dentro de nuestro universo cuatridimensional. Las singularidades y los horizontes estarían ausentes en estos túneles, permitiendo la exploración de reinos de dimensiones superiores.
Uno de los primeros informes que sugieren que los ovnis son interdimensionales procede de la cámara acorazada del FBI. El Memorándum 6751 reconoce la existencia de una presencia alienígena. El exagente del FBI John DeSouza, autor de "The Extra-Dimensionals: True Tales and Concepts of Alien Visitors" (Los extradimensionales: historias reales y conceptos de visitantes extraterrestres), señala el memorando como un documento significativo en ufología.
Fragmento del Memorándum 6751
La información presentada en el memorando se alinea con la Hipótesis Interdimensional, que sugiere que los ovnis proceden de otras dimensiones y no de lugares extraterrestres. El memorando menciona varias características que apoyan esta idea. La afirmación de que atacar un ovni probablemente provocaría la destrucción del avión atacante indica capacidades defensivas avanzadas más allá de nuestra comprensión.
La mención de distintos tipos de ocupantes o de capacidades de control remoto implica la presencia de seres o entidades de otras dimensiones. Los informes sobre ovnis que utilizan energía radiante o rayos para desintegrar las naves atacantes sugieren una tecnología muy avanzada.
La capacidad de los ovnis para desaparecer sin dejar rastro indica su potencial para atravesar dimensiones o manipular la visibilidad. Aunque los ovnis pueden no ser localizables por radio convencional, su detectabilidad potencial a través del radar apunta a sistemas de comunicación no convencionales. Estos elementos, que se remontan al incidente de Roswell en 1947, contribuyen a fundamentar la hipótesis interdimensional sobre el origen de los ovnis.
Entonces, ¿por qué se estrellan los ovnis?
La perspectiva de Jacques Vallée sobre las caídas de ovnis es bastante diferente de la creencia convencional de que son sucesos accidentales. Él sugiere que estos accidentes son sucesos intencionados con un propósito específico orquestado por los misteriosos visitantes (fuente).
Vallée subraya en primer lugar la naturaleza débil y contradictoria de las pruebas que rodean los accidentes ovnis. Afirma que muchos de los supuestos lugares de los accidentes no han sido debidamente investigados o verificados por expertos independientes. Además, cuestiona la credibilidad de los testigos y denunciantes que afirman haber encontrado cuerpos o restos alienígenas, sugiriendo que pueden ser poco fiables o tener motivos ocultos.
Además, Vallée argumenta que las características físicas de las supuestas naves y materiales alienígenas desafían las leyes de la física y la ingeniería. En lugar de atribuir estas anomalías a nuestra falta de comprensión, propone que son el resultado de una manipulación deliberada de la percepción humana por parte de la inteligencia OVNI.
Según Vallée, el propósito de los estrellamientos ovnis no es la comunicación directa con la humanidad, sino la creación de un escenario complejo y enigmático que desafía nuestras suposiciones y creencias sobre la realidad. Sugiere que estos accidentes sirven como catalizadores, evocando diversas reacciones de diferentes grupos de personas, como curiosidad, miedo, asombro, escepticismo, negación o fascinación. Vallée considera que estas reacciones forman parte de un experimento en curso llevado a cabo por la inteligencia OVNI sobre la consciencia y la cultura humanas, que podría tener profundas implicaciones para nuestra evolución futura.
Vallée reconoce que desconoce el objetivo o motivo último de la inteligencia OVNI. Sin embargo, afirma que no es ni hostil ni benévola, sino más bien indiferente a nuestro bienestar. Advierte del peligro de interpretar el fenómeno OVNI únicamente en función de nuestras propias expectativas o deseos e insta a mantener una actitud abierta y crítica.
En última instancia, Vallée aboga por el desarrollo de un nuevo paradigma científico que pueda abarcar la naturaleza multidimensional de la realidad y dar cabida a la posibilidad de otras formas de inteligencia y consciencia más allá de la nuestra.
Experimentar otra dimensión
En el programa de Jesse Michels, Vallée habla de un caso OVNI muy extraño que incluye la experiencia de otra dimensión por la testigo. Vallée declaró:
"Hubo un caso en San José. Una mujer había visto algo sobre su casa. Era un disco grande, y le pregunté: '¿cómo era de grande?', y ella respondió, bueno, que era del mismo tamaño que su casa. 'Era, ya sabe, como eso'. Entonces le digo: 'bueno, cuando entraste, dijiste que había un ser, y que el ser te llevó por una escalera'. Digo: '¿a dónde iba la escalera?'. Bueno, la escalera subía por el lateral de esta gran habitación redonda. Digo, '¿cómo lo compararías?'. Bueno, como una sala de cine, ya saben, como un cine M5. Le dije: 'es más grande que tu casa'".Poco después de la entrevista de Grusch, un abogado estadounidense, Daniel Sheehan, compartió un incidente similar. Daily Mail informó:
"Un ovni estrellado recuperado por el ejército de EEUU 'distorsionó el espacio-tiempo' y era 'más grande por dentro', afirma un abogado de alto nivel involucrado en llevar a denunciantes OVNI al Congreso".El periódico escribe además:
"Daniel Sheehan dice que le contó la alucinante historia un denunciante que supuestamente participó en un programa ilegalmente no revelado de recuperación de naves espaciales no humanas estrelladas, y que ahora ha informado al personal del Comité del Senado sobre Inteligencia".Sheehan describió el relato que le hizo una persona con información privilegiada sobre un programa de recuperación de naves espaciales estrelladas. Según el relato de Sheehan, la recuperación implicó un platillo de 9 metros parcialmente incrustado en la tierra. Cuando se intentó sacarlo con una excavadora, el platillo se desprendió en forma de trozo de pastel, revelando su construcción.
Sheehan mencionó que una persona entró en el platillo y, en su interior, se describió tan grande como un estadio de fútbol, lo que provocó desorientación y náuseas. También afirmó que había distorsiones temporales y espaciales asociadas a la nave. Sin embargo, Sheehan no dio detalles concretos, como lugar o fecha del incidente, ni ofreció ninguna prueba que respaldara sus afirmaciones.
Es importante señalar que la falta de información específica, documentación y fotografías ha llevado a los escépticos a cuestionar la credibilidad de tales historias sobre ovnis extraterrestres almacenados por programas secretos del gobierno. Sin embargo, algunos oficiales de inteligencia militar han expresado su apoyo a las afirmaciones de Sheehan, señalando que el denunciante que presentó la información se ha puesto en riesgo al presentar sus afirmaciones a los Inspectores Generales del Departamento de Defensa y de la Comunidad de Inteligencia bajo pena de perjurio.
Comentario: Ver también: