Los datos de actividad neuronal fueron obtenidos de 29 voluntarios con epilepsia mediante electrodos colocados sobre su corteza cerebral mientras escuchaban la primera parte de 'Another Brick in the Wall'.
pink floyd
© Michael Ochs Archives / Stringer / Gettyimages.ru
Un equipo de investigadores estadounidenses ha logrado reconstruir la primera parte de la canción 'Another Brick in the Wall' de la banda de rock Pink Floyd, a partir de grabaciones de la actividad eléctrica del cerebro de 29 voluntarios, según queda recogido en un nuevo estudio publicado este martes en la revista PLOS Biology.

Los neurocientíficos analizaron la actividad neuronal de los voluntarios mientras escuchaban el tema. Los datos fueron recogidos por el equipo de Albany Medical Center mediante 2.668 electrodos que se colocaron sobre la corteza cerebral de los pacientes mientras se sometían a una operación quirúrgica programada para curar epilepsia.

Para descodificar las grabaciones obtenidas, los investigadores utilizaron un modelo de inteligencia artificial previamente entrenado que analizó los patrones de respuesta del cerebro a distintos componentes del perfil acústico de la canción, como los cambios de tono, ritmo y timbre. Después, otro modelo volvió a ensamblar la canción para determinar los sonidos que oían los pacientes, pudiendo recrear un audio, confuso pero reconocible, de la canción. "Suena un poco como si estuvieran hablando bajo el agua, pero es la primera vez que lo hacemos", señaló el neurólogo Robert Knight, uno de los autores del estudio.

En este enlace de la revista científica Science se puede escuchar la canción original y su versión reconstruida con uso de inteligencia artificial.

Asimismo, los investigadores pudieron identificar una nueva subregión necesaria para percibir el ritmo musical y confirmaron que la percepción de la música se basa predominantemente en el hemisferio derecho.

Los resultados del estudio podrían ser útiles para lidiar con las interfaces cerebro-computadora, como los dispositivos protésicos destinados a personas con trastornos neurológicos que afectan al habla, como el ictus o la esclerosis lateral amiotrófica (ELA)