Las FDI aseguraron que al inundar las infraestructuras del grupo palestino, los militares examinan las características del suelo y los sistemas hídricos de cada zona concreta.
Tunnels Gaza
© Abed Rahim Khatib / Legion-MediaTrabajadores palestinos descansan en el interior de un túnel excavado bajo la frontera entre Gaza y Egipto, en el sur de la Franja de Gaza, el 27 de agosto de 2013.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) admitieron el martes que están inundando con agua las infraestructuras subterráneas de Hamás en la Franja de Gaza.

"En esta guerra, las FDI han puesto en práctica nuevas capacidades para neutralizar la infraestructura terrorista subterránea en la Franja de Gaza, mediante la canalización de grandes volúmenes de agua hacia los túneles", reza el comunicado del Ejército israelí.

En medio de las preocupaciones sobre un posible desastre ecológico a gran escala, las FDI aseguraron que antes de inundar las infraestructuras del grupo palestino, los militares examinan las características del suelo y los sistemas hídricos de cada zona concreta, para asegurarse de que no se causen daños a las aguas subterráneas. "Sólo se bombean las rutas y ubicaciones de túneles adecuados, y el método de operación se selecciona caso por caso", afirman las FDI.

También sostienen que las inundaciones son uno entre diversos medios implementados para actuar contra la infraestructura subterránea del movimiento en la Franja de Gaza. "Los esfuerzos contra Hamás incluyen ataques aéreos, operaciones de combate subterráneo y operaciones especiales con medios tecnológicos", detallan las FDI.


Según el Ejército, dicha herramienta "representa un importante avance tecnológico y de ingeniería en la lucha contra la amenaza de las infraestructuras terroristas subterráneas, y es resultado del trabajo conjunto de varios cuerpos de los servicios de seguridad israelíes".

En diciembre, los medios de comunicación informaron que el país hebreo había comenzado a bombear agua de mar en el complejo palestino de túneles en Gaza, pero la información no fue confirmada oficialmente. Entretanto, han circulado por las redes sociales imágenes del supuesto bombeo de agua. Ya ha habido llamamientos para que Israel se abstenga de adoptar tales medidas.

Al comentar la situación en Oriente Medio, el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, declaró a mediados de enero que la inundación de dicha infraestructura puede ser considerada como "genocidio", y aseveró que las consecuencias de la contaminación de las aguas subterráneas -única fuente de abastecimiento de agua potable para la población de Gaza- persistirán durante siglos. Según el diplomático, las acciones de Tel Aviv podrían amenazar "no solo con un desastre ecológico a gran escala, sino que también harán que el territorio del enclave sea prácticamente inhabitable".