Traducido por el equipo de SOTT.net

Se ha confirmado la muerte de una ballena gris joven que aparecio en las costas de La Jolla el jueves por la tarde.
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Según los informes, la ballena encalló en una zona poco profunda de marea baja. Cuando empezaron a llegar las llamadas de los bañistas, científicos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica acudieron al lugar para ver si se podía hacer algo para ayudar a la cría a volver a aguas más profundas. La ballena seguía viva, pero su situación era desesperada. Lamentablemente, los funcionarios de la NOAA creen que la ballena estaba muerta a las 20:30 horas.

NOAA dijo a los reporteros de CBS8 que la ballena era sólo unos pocos años de edad, mide 7 metros de largo y pesa alrededor de 11.000 libras. En la madurez, las ballenas grises pueden llegar a medir 15 metros de largo y pesar 90,000 libras.


En el momento de redactar este informe, los científicos de la NOAA aún no han determinado la causa de la muerte, pero están trabajando junto con los socorristas para retirar al animal de la playa. No había signos evidentes de lesión o enfermedad, pero esperan que una necropsia arroje más luz sobre lo que mató a la ballena.

En los últimos años, ha habido un número inusual de varamientos de ballenas grises. "Desde el 1 de enero de 2019, se han producido encallamientos elevados de ballenas grises a lo largo de la costa oeste de América del Norte, desde México hasta Alaska", escribió la NOAA. "Este evento ha sido declarado un Evento de Mortalidad Inusual (UME)".

La razón detrás del UME, sin embargo, no está clara. "Se realizaron exámenes de necropsia completos o parciales en un subconjunto de las ballenas", explicó la NOAA. "Los hallazgos preliminares en varias de las ballenas han mostrado evidencias de emaciación. Estos hallazgos no son consistentes en todas las ballenas examinadas, por lo que se necesita más investigación."