Los gobiernos que venden armas a "Israel" y lo protegen ante los organismos internacionales perdieron el derecho a predicar al mundo sobre derechos humanos, opresión y libertad, aseveró el asesor de comunicaciones de Sudáfrica, Mohamed Faizal Dawjee, en un evento en Turquía.
l asesor de comunicaciones de Sudáfrica, Mohamed Faizal Dawjee
El asesor de comunicaciones de Sudáfrica, Mohamed Faizal Dawjee
Las naciones occidentales no deberían hablar de derechos humanos, opinó el asesor de comunicaciones de Sudáfrica, Mohamed Faizal Dawjee, a la agencia turca de noticias Anadolu.

"Cualquier gobierno que cometa injusticias debería rendir cuentas", recalcó el enviado de Sudáfrica al Foro de Diplomacia de Antalya, en Turquía, donde el tema de Gaza y la causa palestina en general resultaron materias importantes.

El estratega de comunicaciones del gobierno sudafricano denunció la posición de Occidente sobre la agresión de "Israel" a la Franja de Gaza, y acusó a sus representantes de ser cómplices en el genocidio del pueblo palestino.

A juicio del también exdirector de medios, Occidente "perdió el derecho" a predicar al mundo sobre derechos humanos, opresión y libertad.

En cuanto a la solicitud de su país ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), Dawjee destacó la necesidad de reconocer que la actual política exterior de Sudáfrica sí se basa en esos valores.

Los palestinos experimentan el "mismo tipo de opresión, injusticia y apartheid" vivido por los sudafricanos hace algunas décadas, recordó el estratega.

También narró alarmado cómo muchos líderes de visita en los territorios ocupados por la entidad sionista evaluaron lo visto como "mucho peor" que los acontecimientos del período de opresión en Sudáfrica.

Ni el genocidio ni el apartheid pueden ser tolerados en ningún país, y ahora "Israel" es culpable de cometerlos en Palestina, enfatizó Dawjee.

Reconoció además las presiones sobre el gobierno sudafricano para retirar el caso, pero cuando la CIJ decidió a favor de Sudáfrica, todos se dieron cuenta de la significación del asunto, y muchas naciones detuvieron sus ventas de armas a "Israel" debido a su preocupación de ser cómplices de esos crímenes de guerra.

En su opinión, esta es una nueva era, de mayor solidaridad social entre países conocidos como el Sur Global, cuya unidad ya es palpable, así como sus exigencias de un nuevo orden internacional.

Un foro como el de Antalya podría unir a diferentes grupos y propiciar el necesario diálogo, precisó Dawjee, y resaltó la importancia del discurso del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, como anfitrión del evento.