Traducido por el equipo de SOTT.net

Se ha desarrollado una nueva evaluación psicológica para medir la adhesión a actitudes relacionadas con la justicia social crítica. Los resultados de su aplicación en un estudio finlandés revelan que una mayor alineación con estas creencias llamadas "woke" se correlaciona con mayores casos de ansiedad y depresión, como se detalla en una publicación en el Scandinavian Journal of Psychology.
depression
El auge de la justicia social crítica, que se centra en identificar y abordar las desigualdades sistémicas entre diversos grupos de identidad, ha suscitado debates sobre su influencia en el mundo académico, la política y la vida cotidiana. Esta orientación particular hacia la justicia social -a menudo asociada con conceptos como interseccionalidad, antirracismo y, coloquialmente, "wokeness"- ha sido tanto alabada por su reconocimiento de las barreras sistémicas a las que se enfrentan los grupos marginados como criticada por su enfoque de la identidad y la libertad de expresión.

Sin embargo, a pesar del debate en torno a la justicia social crítica, ha habido una laguna notable en los datos empíricos sobre su alcance e impacto. Consciente de ello, el autor del nuevo estudio se propuso crear una herramienta fiable para evaluar la justicia social crítica y explorar su prevalencia y efectos.

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"Había estado prestando atención a un fenómeno en las universidades estadounidenses, donde en la década de 2010 se impuso un nuevo discurso sobre la justicia social", explica el autor del estudio, Oskari Lahtinen, investigador principal del centro insignia de investigación INVEST de la Universidad de Turku y autor del libro Onko mindfulnessista mihinkään? ("¿Tiene sentido el mindfulness?").

"Aunque el discurso de la justicia social crítica (o interseccional o 'woke') se nutre principalmente de las dinámicas de la sociedad estadounidense, ahora también ha aflorado en otros países occidentales. La llegada de un discurso de justicia social crítica (a menudo llamado 'woke') suscitó un gran debate en los medios de comunicación finlandeses en los últimos dos años."

"Este debate carecía en gran medida de datos, por lo que podía considerarse una cuestión interesante estudiar la prevalencia de estas actitudes. Antes del estudio no existía ningún instrumento fiable y válido para evaluar el alcance y la prevalencia de estas actitudes en diferentes poblaciones, así que me propuse desarrollar uno".

La fase inicial de la investigación se dedicó a crear una escala piloto para evaluar las actitudes ante la justicia social crítica. Este proceso comenzó con una revisión exhaustiva de la literatura sobre feminismo interseccional, teoría crítica de la raza, teoría queer y otras disciplinas académicas relevantes que informan sobre la justicia social crítica. Sobre la base de estos marcos teóricos, Lahtinen redactó los ítems candidatos para la escala relacionados con las creencias sobre la opresión sistémica.

A continuación, la escala piloto se probó con una muestra de 851 participantes, entre los que había personal universitario y estudiantes, principalmente de la Universidad de Turku, junto con un número menor de participantes de otras universidades finlandesas y el público en general.

Tras el estudio piloto, Lahtinen realizó un segundo estudio centrado en perfeccionar la escala a partir de los resultados iniciales y validarla con una muestra más amplia y representativa. En esta fase se redactaron elementos adicionales para captar mejor las ideas que encarnan la justicia social crítica.

A continuación, la escala perfeccionada se administró a más de 5.000 participantes mediante una encuesta nacional distribuida a través de Helsingin Sanomat, el periódico más importante de Finlandia. Con ello se pretendía llegar a una amplia muestra representativa de la población finlandesa, aumentando así la generalizabilidad de los resultados.

La versión final de la Escala de Actitud hacia la Justicia Social Crítica demostró una alta fiabilidad y un buen ajuste del modelo. Esto significa que la escala era fiable en diferentes muestras y contextos, y que captaba eficazmente el constructo subyacente de las actitudes críticas hacia la justicia social. La escala también demostró una buena validez convergente y divergente, lo que sugiere que es una herramienta eficaz para medir las actitudes hacia la justicia social crítica.

La escala final constaba de siete ítems:
  • "Si los blancos tienen, en promedio, un nivel de ingresos superior al de los negros, es a causa del racismo."
  • "Las listas de lectura de las universidades deberían incluir menos autores blancos o europeos."
  • "Las microagresiones deberían combatirse a menudo y de forma activa."
  • "Las mujeres trans* que compiten con mujeres en deportes no están ayudando a los derechos de las mujeres." (puntuación inversa)
  • "No necesitamos hablar más sobre el color de la piel de las personas."
  • "Una persona blanca no puede entender cómo se siente una persona negra tan bien como otra persona negra."
  • "Un miembro de un grupo privilegiado puede adoptar rasgos o elementos culturales de un grupo menos privilegiado." (puntuación inversa)
Una de las principales revelaciones del estudio fue que las actitudes hacia la justicia social crítica no están tan extendidas en Finlandia como podría deducirse de los debates públicos y en los medios de comunicación. En general, los resultados sugieren una recepción cautelosa de la justicia social crítica entre la población general. Esta observación fue particularmente pronunciada entre los participantes masculinos, que mostraron un acuerdo considerablemente menor con las afirmaciones en comparación con sus homólogos femeninos.

"La división por sexos fue probablemente lo que más me sorprendió", declaró Lahtinen a PsyPost. "Tres de cada cinco mujeres ven positivamente las ideas 'woke', pero sólo uno de cada siete hombres. Este fue el caso en Finlandia, al menos."


Comentario: No es tan sorprendente. Lo mismo ocurre en EE.UU. Las ideas Woke recurren al aspecto simplista daño/cuidado de la teoría de los fundamentos morales explicada por el psicólogo Jonathan Haidt y sus colegas.


El estudio también reveló variaciones en las actitudes hacia la justicia social crítica entre distintos grupos demográficos y sociales. Los niveles más altos de acuerdo con la justicia social crítica se dieron sobre todo entre las personas que se identificaban con partidos políticos de izquierdas y las estudiantes universitarias de campos como las ciencias sociales, la educación y las humanidades. Por otro lado, los individuos asociados con las áreas STEM y las afiliaciones políticas de derechas tendieron a mostrar un menor acuerdo con los principios de justicia social crítica.

Un aspecto intrigante del estudio fue su exploración de la relación entre justicia social crítica y bienestar mental. Lahtinen descubrió una correlación entre un mayor acuerdo con las actitudes de justicia social crítica y un aumento de los informes de ansiedad y depresión. La mayor correlación positiva con la ansiedad y la depresión y la mayor correlación negativa con la felicidad se observó en el acuerdo con la afirmación "Si los blancos tienen, en promedio, más ingresos que los negros, es a causa del racismo".

Sin embargo, estas asociaciones estaban más fuertemente correlacionadas con la orientación política de los participantes que con las actitudes hacia la justicia social crítica per se. En concreto, pertenecer a la izquierda política era más predictivo de un menor bienestar mental que las puntuaciones altas en justicia social crítica por sí solas. Esto sugiere que el vínculo entre las actitudes hacia hacia la justicia social crítica y la salud mental es complejo y puede estar mediado por creencias políticas e ideológicas más amplias.

La nueva investigación ofrece una visión única de las actitudes hacia la justicia social crítica y sus implicaciones en la sociedad contemporánea. Pero el hecho de que el estudio se centre en Finlandia exige cautela a la hora de generalizar sus conclusiones a otros contextos.

"Los estudios eran bastante sólidos, con un tamaño de muestra superior a 5.000 personas y buenas propiedades psicométricas", afirma Lahtinen. "Sin embargo, habría que validar la escala en muestras norteamericanas para saber cómo se manifiestan allí estas actitudes. Animo a los colegas de Estados Unidos a estudiar la prevalencia de estas actitudes en el país de donde son originarias."

El estudio, "Construction and validation of a scale for assessing critical social justice attitudes" (Construcción y validación de una escala para evaluar actitudes ante la justicia crítica), se publicó el 14 de marzo de 2024.
Eric W. Dolan es el fundador, editor y redactor de PsyPost. Tiene más de 10 años de experiencia en el periodismo y es licenciado en Psicología por la Universidad de Bradley.