Moscú y Pekín "están solidificando su alianza" - tanto en el ámbito económico como en el político y militar - y esto es mucho peor y más complicado para EE.UU. de lo que fue en su momento la Guerra Fría, sostienen medios estadounidenses.
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Antiguamente rivales, hoy en día Rusia y China están fortaleciendo su cooperación activamente. Rusia y China colaboran en el marco del
Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) que componen junto con otros 19 países, y también en
el Grupo de los 20 (G-20), un foro de jefes de Estado, gobernadores de bancos centrales y ministros de Finanzas de los países miembros. Pekín y Moscú son miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, lo que supone derecho de veto.
Pero como punto de partida de su aproximamiento activo debería considerarse la creación de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) en 2001. Hoy en día a la unión intergubernamental formada por Rusia, China, Kazajistán, Kirguistán y Uzbekistán, que ocupa un 60% de todo el territorio de Eurasia y alberga un cuarto de la población de todo el planeta,
piensa unirse también la India.
La OSC tiene numerosos proyectos conjuntos tanto en materia de seguridad como en la esfera económica, sobre todo en el sector energético.
Otro bloque donde Moscú y Pekín cooperan es el BRICS, que incluye también a la India, Brasil, y Sudáfrica. La unión posee más de un tercio de las tierras cultivables del planeta y produce el 40% del trigo, el 50% de la carne de cerdo y el 30% de la carne de vacuno y de la carne de aves de corral. El PIB común de la unión es de aproximadamente 15.800 millones de dólares: un 14,6% del PIB mundial.
El creciente aproximamiento entre Moscú y Pekín es "un fuerte dolor de cabeza" para EE.UU. y las publicaciones en los medios locales lo confirman, sostiene el rotativo ruso '
Vzglyad' y da varios ejemplos. Desde el punto de vista de los periodistas del diario '
The Washington Post' Douglas E. Schoen y Melik Kaylan, la coordinación estratégica de Rusia y China en la arena mundial, que frecuentemente desemboca en la postura común acerca de la agenda política internacional, es una situación más dinámica y sin duda más difícil de lo que fue la Guerra Fría para EE.UU. Su preocupación parece justificada.
Comentario: La hipocresía de estos "líderes" es espantosa. Por un lado se cargan de armamento que utilizan para invadir y masacrar al pueblo del este de Ucrania perpetuando una crisis orquestada por occidente que permitió que Poroshenko asumiera su cargo actual... mientras, afirman que quieren la paz y el diálogo. Ciertamente, fueron los rusos quienes dijeron que solamente el diálogo puede llevar a resolver este conflicto y, a pesar de toda la propaganda occidental que busca hacernos creer que Putin es un agresor, es Rusia la que se ha mostrado más interesada en una resolución pacífica, antes que una "solución" militar.