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En los últimos días algunos de sus habitantes han manifestado irritación en los ojos y garganta, nadie les ha informado qué tan contaminado está el aire que respiran.
Las tolvaneras elevan la ceniza acumulada en banquetas y techos de este poblado, los más jóvenes ni siquiera hacen el esfuerzo de taparse la nariz y boca para que el polvo visible no los afecte, aunque los más ancianos de la zona sí lo hacen, a fin de cuentas son ellos quienes en su mayoría dicen tener algunas molestias.
Hasta el momento las autoridades únicamente les han informado sobre la cantidad de ceniza que ha caído, pero nadie les ha dicho cuál es la calidad de aire, por ejemplo los puntos IMECA, que al menos en seis días recientes han excedido la norma.
Agustina Conde vive en el número 30 de la calle Campestre de San Pedro Nexapa, municipio de Amecameca. Ella hace labor social con una centena de ancianos de la localidad. Refiere que ha observado cómo muchos de ellos se tallan los ojos porque presentan irritación.
Otros más, dice, manifiestan resequedad en la garganta. Agustina, como toda la población de esta comunidad, desconoce que el pasado jueves el índice IMECA llegó a los 144 puntos, máximo registrado en la localidad por la Unidad Móvil de Monitoreo Atmosférico ubicada en San Pedro Nexapa.
Rufina Rosas Rosales, una mujer de 80 años, levanta la mano durante una reunión de personas de la tercera edad en la muy pobre biblioteca de San Pedro Nexapa para decir que es lamentable no estar enterados sobre la calidad del aire.
"Yo he tenido irritación en los ojos, otras personas también, además de más información esperamos cuando menos nos den un cubrebocas".
El titular de la Dirección de Protección Civil de Amecameca, Javier Alonso Meneses, asegura que se han entregado decenas de estas protecciones a la comunidad más cercana al volcán. No obstante en San Pedro Nexapa nadie los porta, dicen que aquí no ha llegado un cubrebocas.
Ayer, desde este lugar se podía apreciar el imponente Popocatépetl, un cielo gris cubría los alrededores como si se tratara de un enjambre: "es ceniza, es ceniza" decía un niño en la plaza central a la vez que los vehículos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, ubicados en esta zona, acumulaban el polvo volcánico.
Desde temprano Armando Juárez realiza viajes del centro de Amecameca al Poblado de San Pedro Nexapa en su combi de la ruta 61 "es la garganta la que se reseca en estos días, otros no tienen molestias, pero yo sí", refiere a este reportero.
En los últimos días ha sido el Ejército Mexicano el que ha repartido cubrebocas a las comunidades más cercanas al volcán, además sin causar alarmas ha dado orientación a pobladores sobre las medidas a tomar.
Ni siquiera el día en que los puntos IMECA llegaron a los 144 puntos se suspendieron clases o se limitaron las actividades físicas en las escuelas Leona Vicario y Lázaro Cárdenas de San Pedro Nexapa.
Ayer en conferencia de prensa el Gobierno del Estado de México señaló que ante las cenizas es suficiente la protección de un cubrebocas y que sus albergues y rutas de evacuación se encuentran en óptimas condiciones para atender a la población en caso de registrarse una emergencia.
Salvador Neme, secretario general del Gobierno del Estado de México, dijo que no se prevén evacuaciones en los días subsecuentes, pero se planea abrir 266 albergues para dar cabida a 85 mil personas. En una primera etapa se instalarían 133.
Mientras que la Secretaría de Salud del Gobierno Federal indicó que la población debe tener cuidado con el polvo volcánico, porque es dañino para la población general.
La dependencia recomendó a la población expuesta a la ceniza el uso de mascarillas para proteger ojos, nariz y boca y si es posible mantenerse en casa el mayor tiempo posible.
En el Distrito Federal las autoridades de Salud dieron salida a 222 brigadas que repartirán 483 mil cubrebocas en las delegaciones Xochimilco, Milpa Alta, Tláhuac, VenustianoCarranza e Iztacalco, ante la presencia de ceniza en los últimos días.
La dependencia aseguró que los 32 hospitalesy 220 clínicas del DF están listas para atender a la población.
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