Auditores europeos revelaron la malversación de unos 5.000 millones de euros por parte de la UE en 2011, informó el Tribunal de Cuentas del bloque.


"En términos simples, los recursos con frecuencia no alcanzaban el objetivo deseado o no se gastaban de manera óptima", dijo Vítor Caldeira, presidente del Tribunal de Cuentas Europeo. "Encontramos que los Estados miembros no cumplen su trabajo en su totalidad, como debe ser", agregó.

Los sectores donde se produjo el mayor derroche son agricultura, la pesca y sanidad pública. En consecuencia el organismo instó a los jefes de Estado a adoptar medidas severas al respecto.

Los economistas sostuvieron que la causa de este gasto es la ineficiencia de los sistemas de control en el seno de los 27.

"Yo creo que este problema es común a todos los países de la UE, unos más y otros menos, y sobre todo al control de gastos de las instituciones europeas [...] Todo este despilfarro tiene una causa fundamental: no hay un control del gasto público eficiente ni en Bruselas ni en los países miembro de la UE", le dijo a RT el secretario de Economía de Izquierda Unida, José Antonio García Rubio.

Esta afirmación llega en medio de presiones y desacuerdos entre los miembros con respecto al presupuesto para el período 2014-2020. Actualmente los países europeos experimentan una profunda crisis económica. Muchos gobiernos tienen que recurrir a medidas de austeridad para reducir el déficit presupuestario. Una de las situaciones más difíciles se observa en Grecia. Italia, Irlanda, Portugal y España también están al borde del incumplimiento.

Mientras tanto, las previsiones de los expertos acerca del período en que la situación podría corregirse son decepcionantes. La canciller alemana Angela Merkel reconoció que para sobreponerse del declive actual harán falta al menos cinco años.

El economista jefe del Fondo Monetario Internacional, Olivier Blanchard, en tanto, dijo que para superar los efectos de la crisis financiera de 2008, la economía mundial necesitará una década.