El sol inaugura el clima espacial de este nuevo 2014 con una gran llamarada M9.9 de Año Nuevo, causando apagones moderados de radio sobre el Pacífico y sobre la Costa Oeste de todo el continente sudaméricano.

llamarada solar Enero 2014
Nuestro Astro Rey también se ha querido sumar a lo festejos del Año Nuevo 2014, y a las 19:50 del día 1, hora peninsular española, desencadenó una nueva gran llamarada solar equiparable a X (M9.9, siguiendo la escala NOAA, donde las llamaradas solares M oscilan de M1 a M9, antes de pasar a la categoría X; a una M9.9 se le da la consideración y atención de X).

Nada más producirse la nueva gran llamarada solar, se produjeron apagones moderados de radio (R2, en una escala de R1 a R5) sobre el Océano Pacífico y toda la Costa Oeste del Continente Americano (de Norte, Centro y Sur de América).

llamarada solar Enero 2014
El nuevo fenómeno solar, proveniente de la región activa 1936 también ha provocado una eyección de masa coronal confirmada por NOAA y por el SIDC de Bélgica, si bien, dado el carácter ya muy rotado hacia el limbo solar oeste de dicha posición es posible que pueda resultar "no geoefectiva", que no alcance a la Tierra, si bien ello debe ser confirmado de modo efectivo.

De serlo finalmente, y dependiendo de su velocidad estimada, podría dar lugar a pequeñas tormentas solares sin otra consecuencia que unas bonitas auroras boreales.

"Este tipo de fenómenos no debe causar preocupación, los eventos potencialmente peligrosos del clima espacial se suelen dar en escalas muy superiores, y deben darse en presencia de condiciones muy concretas que son las que importa verificar con prontitud una vez se desencadenan estos otros".

llamarada solar Enero 2014
"Tanbien es importante el señalar que cualquier evento por encima de M5 ya es un evento de consideracion, y se realiza un exaustivo seguimiento por sus posibles consecuencias en nuestro planeta", han señalado desde el Clima espacial.net

Video de la llamarada M 9.9, justo en el destello de esta fulguracion, donde se aprecia como parte del plasma eyectado cae de nuevo sobre la superficie del sol al no vencer la gravedad del Astro.