Imagen
© Desconocido
Un nuevo estado cuántico del agua encontrado en los nanotubos de carbono a temperatura ambiente podría contener implicaciones importantes para la vida.

La mayoría de los exobiólogos piensan que el agua es un elemento clave para la vida, sin perjuicio de que ésta pueda desarrollarse sin agua.

Pero un reciente estudio pone de manifiesto que el agua posee una serie de propiedades cuánticas que el resto de los elementos químicos no comparten. Un conocido ejemplo es que el agua se expande cuando se congela y flota en el agua líquida. Esta cambio de estado también se relaciona con la capa de hielo que recubre lagos y océanos a muy bajas temperaturas, manteniendo líquida y templada el agua bajo la capa, permitiendo así que la vida prolifere y evolucione.

Estas propiedades son el resultado también de las especiales propiedades de las moléculas de agua.

Con fecha de 26 de Enero, George Reiter de la Universidad de Houston y su equipo de investigadores han evidenciado que el agua es mucho más compleja y extraña de lo que anteriormente se pensaba, tanto que es capaz de generar estados cuánticos o intermedios, cuando se analiza en la escala nanométrica.

La cuestión es que bajo determinadas condiciones electromagnéticas, el agua se comporta como una auténtica red interconectada de partículas.

Seguidamente mostramos una gráfica que resume el hallazgo de George Reiter y su equipo, y que ha dejado perpleja a toda la comunidad científica ortodoxa.

No en vano, existe una clara relación entre estados cuánticos, radiofrecuencia y agua en el desarrollo de la vida.

El estudio completo pueden descargarlo aquí: Evidence Of A New Quantum State Of Nano-Confifined Water"