Joesley Batista, el magnate empresario de la JBS, realiza fuertes declaraciones en contra de Temer, el presidente brasileño, donde lo acusa de "ser el jefe de la organización criminal más peligrosa del país", y además asevera que nunca tuvo el 'valor' de enfrentarlo.
Joesley Batista, dueño de JBS, el hombre que desencadenó un escándalo al grabar una conversación con el presidente brasileño."Quienes no están presos, están hoy en el palacio presidencial de Planalto. Esa pandilla es muy peligrosa", expresó
Batista realiza fuertes declaraciones en contra de Temer
Batista es empresario, "el gigante de la industria frigorífica JBS", mismo que el pasado mes de mayo puso a 'disposición' de las autoridades una grabación en la que Temer da su 'consentimiento' para pagar por el silencio de un ex diputado, quien se encuentra en prisión, hecho que desencadenó un escándalo en el ámbito político.El empresario señala que el presidente brasileño es "el jefe de la organización criminal más peligrosa del país".
Esas revelaciones llevaron a la Suprema Corte a autorizar la apertura de una investigación contra el presidente por corrupción pasiva y obstrucción a la justicia.
Involucrado en varios puntos de la operación Lava Jato, la gigantesca investigación que reveló el megaescándalo de corrupción que sacude a Brasil, Batista aceptó colaborar con las autoridades a medida que las indagatorias comenzaban a cerrar sus redes sobre sus negocios.Desde ese momento, los llamados para que renuncie se multiplicaron, pero Temer, de 76 años, niega las acusaciones y rechaza categóricamente dejar el poder.
Secretos revelados a la justicia, a cambio de reducir su pena
En sus confesiones, Batista reveló que se pagaron decenas de millones de dólares en sobornos para alimentar las cajas negras de partidos políticos de todos los colores, incluyendo al PMDB de Temer.
"Desde que conocí a Temer, comenzó a pedirme dinero para financiar sus campañas. No tiene muchas ceremonias para tratar sobre ese asunto" del dinero, señaló Batista en una entrevista realizada por el Semanario Época.
El gigante de la JBS, declaró que nunca tuvieron una relación amistosa, su relación siempre se debió a lo 'institucional', además señala, que Temer lo veía como "un empresario que podía financiar sus campañas políticas y organizar esquemas que darían lugar a sobornos".
En exilio forzado desde que estalló el escándalo, Batista regresó el domingo pasado al país y el viernes reiteró en una declaración ante la policía federal las acusaciones que lanzó en sus testimonios anteriores.
Los rumores señalaban que Batista se encontraba en Nueva York con su familia, pero en un comunicado declaró que en realidad estuvo en China, "para proteger la integridad de su familia, que ha sido amenazada en reiteradas oportunidades desde que él decidió colaborar con las autoridades".
Comentario: Celebraremos el día en que el Sr Temer se vea definitivamente tras las rejas y no en la silla presidencial de Brasil, pero celebraremos aún más cuando Brasil solucione su problema de corrupción sistémica.