Este 21 de agosto se producirá un eclipse solar total. Para conocer más acerca del peculiar y bello fenómeno astronómico, Sputnik habló con Wolfgang Steffen Burg, investigador del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Hoy la Luna coincidirá con el Sol en el mismo tamaño angular y se experimentarán dos minutos de oscuridad en pleno día. El fenómeno se verá de forma total en una franja de la Tierra, que en esta ocasión incluye a ciertas zonas de Estados Unidos
Sun sol
© CC BY 2.0 / NASA Goddard Space Flight Center

Desde hace casi 100 años que un eclipse solar no se veía de costa a costa en Estados Unidos, el último fue en 1918. El actual podrá verse en algunos estados de forma total y en otros de forma parcial.

México y países de Centroamérica como Honduras, el Salvador, Guatemala, y el norte de Sudamérica: Brasil, Venezuela, Colombia y de Europa, España podrán observar uno de los eventos astronómicos más esperados del año de forma parcial. Si bien los eclipses solares son más frecuentes y más impresionantes que los lunares, no pueden verse desde todo el planeta.

"Este eclipse total es interesante porque atraviesa todo el continente norteamericano. La Luna estará en una posición media entre la Tierra y el Sol en las zonas donde se podrá apreciar. No ocurre más que eso. Hay muchos mitos antiguos sobre los efectos de los eclipses, pero salvo la sombra y una pequeña baja en la temperatura no hay efectos físicos sobre nuestro planeta", dijo a Sputnik Wolfgang Steffen Burg, investigador del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Sin embargo, los investigadores de la NASA están muy interesados en el eclipse y realizarán una cobertura exhaustiva. Los científicos de la agencia espacial estadounidense estarán físicamente en una docena de sitios de la trayectoria del eclipse, y contarán además con aviones, telescopios y 57 globos aerostáticos.

"Con los vuelos la NASA espera poder aprender más sobre la corona solar, algo que normalmente no se ve. Se trata de la atmósfera externa de la estrella. Los eclipses de este estilo son la única oportunidad para observarla. Esa corona puede dar información acerca de cómo el Sol logra las altas temperaturas que alcanza", explicó el científico.

Los investigadores también intentarán determinar qué papel desempeña el lanzamiento de grandes corrientes de partículas cargadas, conocidas como eyecciones de masa coronal. Lo que se sabe hasta ahora es que pueden alterar los sistemas GPS y otras tecnologías sensibles.

"El Sol tiene manchas oscuras en su superficie que aparecen con mayor o menor intensidad durante ciclos de 11 años. Hasta la fecha no se conoce muy bien qué papel juegan estas manchas. El fenómeno actual podrá contribuir a tener un conocimiento más acabado de este tipo de cosas", agregó el investigador.

Además de la NASA, también estarán los aficionados buscando captar la belleza del fenómeno. A ellos Burg recomendó cuidar mucho de los efectos nocivos que puede provocar mirar directamente al Sol.
"Es muy importante que durante el eclipse las personas se cuiden los ojos con filtros especialmente certificados, los vidrios de soldadura pueden ayudar pero no son lo óptimo. Hay que tomar precauciones para no dañar los ojos cuando miramos de forma directa y por tiempo prolongado al Sol", concluyó.
Esta zona del mundo deberá esperar otros siete años para volver a presenciar un fenómeno de tales características. Recién en 2024 volverá a haber un eclipse total.