Recientemente, los arqueólogos chinos han encontrado más de 200 sitios de sepultura en cuevas en altos acantilados frente al río Jinjiang en el municipio de Zhengxing, en Chengdú (centro de China), que datan de las dinastías Han y Jin, es decir, desde el 206 a.C. hasta el 420 d.C.
jinjiang
Pan Shaochi, un funcionario del Instituto de Investigación Arqueológica y de Reliquias Culturales de Chengdú, informó la semana pasada de que el hallazgo resulta excepcional en el siglo XXI debido a la antigüedad de las tumbas y a las dimensiones de las mismas: algunas tumbas tienen hasta siete cámaras con túneles de 20 metros de longitud, según anuncia la agencia oficial de noticias de China, Xinhua.

Algunas tumbas muestran indicios de saqueo, sostuvo Shaochi para después enfatizar que, sin embargo, los arqueólogos han podido recuperar unas 1000 piezas de oro, plata y bronce.

"El descubrimiento de este conjunto de tumbas ha proporcionado materiales muy valiosos para la investigación arqueológica sobre las dinastías Han y Wei-Jin", dijo Shaochi.