La revista de izquierdas Jacobin ha publicado una especie de "reseña" sobre el trabajo del profesor Jordan B. Peterson, con una referencia a su nuevo libro "12 Reglas para la Vida". Escrito por Harrison Fluss, el artículo es titulado afectuosamente 'Jordan Peterson's Bullshit' ("La basura de Jordan Peterson"). Según Fluss, el pensamiento de Peterson está "lleno de pseudociencia, mala psicología popular e irracionalismo profundo". Es bastante entretenido leer el artículo (si disfruta tirarse de los pelos). Si bajara mis estándares de habla civilizada por un momento, incluso lo llamaría mierda. Echémosle un vistazo. Fluss empieza comentando la entrevista reciente de Peterson con Cathy Newman. Al cabo de la segunda frase ya podemos ver cómo terminará.
jordan peterson
Con el éxito de su reciente libro y con más de 40 millones de visitas en YouTube, el estelar Jordan Peterson está en ascenso. Su base de admiradores conservadores y de derecha alternativa está anunciando su entrevista con Cathy Newman de Channel 4 News como una victoria contra la "cultura de lo políticamente correcto".
Aparentemente Fluss tiene acceso a los datos demográficos de la base de admiradores del Dr. Peterson. Me gustaría ver esas estadísticas por mí mismo. Quién sabe, quizás pueda contarme entre los anómalos, porque ni soy conservador ni de la derecha alternativa. Pero, de nuevo, ¿quizás el término tiene sentido? "Derecha-alternativa" no es diferente a muchas otras palabras populares en estos días que sirven como términos genéricos lanzados por pensadores perezosos con el fin de mancillar a cualquiera que pudiera violar incluso la más pequeña pizca o ápice de la Ley de la Cultura de lo Políticamente Correcto. (Note como Fluss coloca Cultura de lo Políticamente Correcto entre comillas, como para dar a entender que no existe tal cosa.)

Pero lo cierto es que si la derecha alternativa es tomada por nacionalismo blanco o algún disparate, entonces Fluss simplemente no está diciendo la verdad. Puede ser útil manipular el lenguaje para intimidar a sus oponentes, pero no es muy civilizado. Quizás Fluss debería tomar un poco de la medicina de "psicología popular" del buen doctor e intentar decir la verdad, o al menos no mentir. Porque plantear que toda la base de admiradores de Peterson es conservadora o de la derecha alternativa simplemente no es verdad.
El intento de Newman de refutar a Peterson a través del debate cordial fracasó después de que ella reconociera elementos de su cosmovisión, incluida la necesidad de una jerarquía corporativa y un espíritu de competencia.
Decir que la aproximación de Newman es cordial es una exageración. Pero dado que Fluss se involucra en el mismo proceso de alucinación mental de tipo "entonces lo que estás diciendo es que...", es fácil ver por qué lo ha interpretado de esa manera. No pienso que Peterson estuviera argumentando la necesidad de jerarquía y competencia (aunque estoy bastante seguro de que argumentaría que hay beneficios en ambas). Él estaba simplemente señalando que estas cosas son inevitables. Son parte de la naturaleza humana. Pero los comunistas niegan la naturaleza humana, y ahí está el problema.
En respuesta a las estadísticas de Newman sobre la brecha salarial, Peterson argumentó que esta desigualdad era una parte necesaria de la dinámica capitalista. Incluso felicitó a Newman por conseguir un trabajo bien remunerado gracias a lo que algunas personas considerarían características "masculinas".
La brecha salarial es un resultado necesario de la igualdad de oportunidades. Es un resultado de la imparcialidad. Si dejamos que la gente tome sus propias decisiones, tendremos brechas salariales, porque la gente toma diferentes decisiones. Una persona que elige trabajar menos obtendrá menos que una persona que trabaja más. Una persona que elige un trabajo que paga menos (aunque podría elegir uno que paga más si lo deseara) obtendrá menos que la persona que elige aquel trabajo que paga más. La única manera de escapar de esto es a través del autoritarismo.
A pesar del comportamiento relativamente cortés de Newman, pronto se enfrentó a una reacción misógina.
"Cortés". Es chistoso que el artículo no incluya citas demostrando la "misoginia" de la reacción. La selección de los comentarios que leí en Twitter y YouTube criticaba a Newman por ser obtusa, negarse a escuchar, y poner palabras en la boca de Peterson. Algunas de esas personas no son muy civilizadas, así que tal vez había comentarios haciendo referencias denigrantes respecto a su género, pero yo no los he visto. Pero, de nuevo, misoginia es otra de esas palabras. Si uno dice algo ofensivo a una mujer, podría ser acusado de misoginia. Si dice la misma cosa a un varón, puede estar seguro de que no será acusado de misandria. (Para más información sobre la política de género, recomiendo encarecidamente el reciente libro de Stephen Baskerville The New Politics of Sex: The Sexual Revolution, Civil Liberties, and the Growth of Governmental Power ["La nueva política del sexo: la revolución sexual, las libertades civiles y el crecimiento del poder gubernamental"])
Peterson es frecuentemente presentado como un enigma. Tanto en la derecha como en la izquierda lo defienden en contra de las acusaciones de fascismo y afiliación con la derecha alternativa. Los expertos convencionales admiran su supuesta consistencia y coherencia (algunos incluso lo elogian como un gran filósofo). Esto es ciertamente verdad en el reciente artículo de opinión en el New York Times de David Brook, que exalta a Peterson como un intelectual público para la era de YouTube.

Los admiradores de Peterson argumentan que él no es un fascista, sólo un liberal clásico; no es racista, sólo alguien que reconoce "diferencias étnicas"; no es misógino, sólo honesto sobre las diferencias reales entre varones y mujeres. Muchos de sus admiradores piensan que sus argumentos no solamente tienen sentido común sino que también son científicamente precisos, lo cual está respaldado por las credenciales de Peterson como profesor de psicología y psicólogo clínico.
La implicación no tan sutil es: estos "defensores" están equivocados. Peterson es de derecha alternativa, fascista, racista y misógino. Él no es consistente o coherente, sus argumentos no son de sentido común o científicamente precisos. Ésas son acusaciones fuertes. También están equivocadas.
Con todo el enfoque en las cuestiones de libertad de expresión y cómo la izquierda supuestamente se ha vuelto autoritaria, hay algo que falta en las discusiones de Peterson. En lugar de ser un crítico "iluminado" y "científico" del postmodernismo, la crítica de Peterson a la izquierda es fundamentalmente nietzscheana.
"Supuestamente"
Las observaciones empíricas de Peterson, que van desde la zoología hasta la psicología pop, comparten un desdén aristocrático por la modernidad. Su cosmovisión se alinea con las tendencias elitistas y antidemocráticas del liberalismo clásico, ejemplificadas en los elogios de Ludwig von Mises y Friedrich von Hayek para Benito Mussolini y Augusto Pinochet respectivamente.

Pero Peterson agrega algo al liberalismo económico de sus predecesores: una concepción trágica del Ser (la cual capitaliza, tras Heidegger) en la que el mundo se divide entre ganadores y perdedores. Esta cosmovisión autoritaria naturaliza la dominación y teje la jerarquía en la estructura misma de la existencia.
La próxima vez que mi sobrino me venza en el juego Palabras Cruzadas me aseguraré de criticarlo por su autoritarismo dominante. Y la próxima vez que vaya a un concierto me aseguraré de balancear el elitismo internalizado de la banda prestando la misma atención a algún chapucero sin talento que toque una versión desafinada de "Stairway To Heaven" en el sótano de su madre. Las afirmaciones de que Peterson tiene "desdén por la modernidad" son un ejemplo de alguien que hace una acusación para la cual no solamente no hay evidencias, sino que además hay evidencias de lo contrario. Como tal, ni siquiera vale la pena refutarla.
Los críticos a menudo se burlan de Peterson por su comparación entre langostas y seres humanos.
Si alguno de esos críticos anónimos realmente lo hace, tal vez quiera considerar la posibilidad de ser un idiota intencionalmente obtuso.
Según su libro más reciente, 12 Reglas para la Vida, la lucha a vida o muerte de las criaturas marinas es un modelo de la sociedad humana.
Newman y Fluss fueron hechos el uno para el otro. Peterson en ninguna parte presenta las Grandes Tradiciones Ancestrales de La Langosta como un "modelo" para la sociedad humana, como si un Moisés crustáceo grabara en el lecho marino la sabiduría de su nación: "¡Tú competirás! ¡Tú ganarás! ¡Tú obtendrás a todas las damas langostas y te deleitarás con los deliciosos apéndices de tus machos-beta inferiores!" Un modelo implica que algo sea normativamente imitado. Jordan no va tan lejos, él simplemente usa a la langosta para mostrar que ciertos aspectos de los circuitos del cerebro humano son muy antiguos, y por lo tanto, están muy arraigados.
Después de una batalla, los combatientes experimentan un efecto químico: la langosta superior comienza a secretar más serotonina, mientras que la langosta más débil o inferior se ve privada de estos químicos de la felicidad. Haciéndose eco de las peores características del darwinismo social del decimonoveno siglo, Peterson usa este ejemplo de la jerarquía de las langostas para analizar la sociedad humana.
Creo que estoy empezando a entender a "los críticos de Jordan Peterson". No les gusta el sentido común, y no les gustan los hechos. Es como si tomaran cualquier observación empírica sobre cómo son las cosas y luego infirieran que la persona que hace esa observación cree que tal situación es la utopía antimarxista que todos debemos seguir. ¿Por qué otro motivo señalaría Peterson la similitud entre las langostas y los humanos? ¡Él debe querer que seamos como langostas! No, me temo que eso es una locura evidentemente estúpida.

Peterson obviamente no cree que el mundo sea perfecto. Es por eso que tiene una "concepción trágica del Ser". Pero en lugar de ofrecer a sus oyentes una utopía ilusoria sin sentido donde no hay competición, todos son iguales (incluso aquellos que no lo son) y se puede reeducar a los humanos para sacarles todas sus cosas malas, él presenta algo mucho más útil: la realidad. El mundo es un lugar difícil. Usted encontrará competición. Sufrirá. Experimentará malevolencia, es decir, gente que quiere hacerle daño solamente por hacerle daño. Incluso podría ser completamente destruido. Pero usted puede aprender a navegar a través de esto. Puede soportar la carga de la vida y traer un poco de orden al mundo, o quizás incluso mucho orden.

El mundo podría no ser sólo un mundo donde todos los "perros" se comen entre sí, como pensaron algunos de los darwinistas sociales. Pero algunos "perros" aún se comen a otros "perros". Y saber eso significa que quizás usted no será comido. Y eso no quiere decir que deba acoplarse al mundo con la misma mentalidad que todos esos otros "perros". Para regresar a Cathy Newman, ella se aproximó al debate usando el mismo espíritu de "jerarquía de dominación" contra el que se opone la gente como Fluss cuando "critica" a Peterson. Sin embargo, en lugar de rebajarse a sí mismo completamente a su nivel, Peterson fue quien intentó ser cordial y cortés.
Él reduce el conflicto de clases a una lucha natural y eterna por la existencia que ninguna revolución política o económica podría mejorar.
Y aquí sale a la luz el delirio ideológico de Fluss: la revolución política o económica puede mejorar la lucha por la existencia. Muéstreme una persona que nunca haya tenido problemas. Muéstreme una revolución que no haya resultado en más sufrimiento. Más al punto, Peterson no habla sobre la 'lucha de clases', no lo ve como el alfa y omega de la existencia humana, como lo hacen el marxista radical Fluss y sus semejantes.

Simpatizo con el sufrimiento que lleva a muchos hacia el marxismo y otras ideologías revolucionarias. Pero el sueño marxista es imposible. Siempre habrá desigualdad. Y al negarse a admitirlo, los ideólogos izquierdistas en realidad niegan que la desigualdad también proporcione lo mejor de la humanidad. Como uno de mis psicólogos favoritos, el Dr. Andrew Lobaczewski, explicó en su libro La ponerología política:
Es una ley universal de la naturaleza que cuanto más elevada sea la organización psicológica de una especie, mayores serán las diferencias psicológicas entre los individuos que la compongan. El ser humano constituye la especie más organizada; por lo tanto, estas variaciones son mayores. Las diferencias psicológicas, tanto cualitativas como cuantitativas, ocurren en todas las estructuras de la personalidad humana que estudiaremos aquí, si bien lo haremos en términos bastante simplificados. Las variedades psicológicas profundas podrían dar la impresión de tratarse de una injusticia de la naturaleza, pero esta última está en su derecho de generarlas, y tienen sentido. [...]

Esta aparente injusticia de la naturaleza es, de hecho, un gran obsequio para la humanidad, ya que permite a las sociedades humanas desarrollar sus complejas estructuras y ser creativas tanto a nivel individual como colectivo. Gracias a la variedad psicológica, el potencial creativo de cualquier sociedad es mucho más elevado de lo que podría serlo si nuestra especie fuese psicológicamente más homogénea. Además, estas variaciones facilitan el desarrollo de la estructura implícita en el interior de la sociedad. El destino de las sociedades humanas depende de una adaptación adecuada de los individuos dentro de esta estructura, y de la manera en que se da uso a los diversos talentos.

Nuestra experiencia nos enseña que las diferencias psicológicas entre las personas son una causa de malos entendidos y de problemas. Sólo nos es posible superar estos conflictos si aceptamos las diferencias psicológicas como una ley de la naturaleza y apreciamos su valor creativo. Eso además nos permitiría comprender objetivamente al hombre y las sociedades humanas. Desafortunadamente, también nos enseñaría que la igualdad bajo la ley de los hombres equivale a una desigualdad bajo la ley de la naturaleza.
El "conflicto de clases" llevado a su lógico fin igualitario forzado implicaría acabar con el genio de la naturaleza y los mayores logros de la humanidad. Sin desigualdad no tendríamos gran o buena música, no tendríamos filosofía, o literatura o arte. Diablos, ni siquiera tendríamos a Marx, ese prolífico bastardo barbudo.

De vuelta a Fluss:
El individuo langosta (perdón, humano) debe desarrollar una actitud agresiva de macho alfa para ascender en la escala social.
No, pero seguro que debe saber cómo luchar, porque los depredadores se sienten atraídos por la debilidad, e incluso el marxismo mágico no puede deshacerse de los depredadores. Tener una espada y saber cómo usarla no es la misma cosa que usar la espada para llegar a la cima. Pero más al grano, sí, la escala social es despiadada, y se necesita un individuo muy competente para escalarla y escalarla bien. Es más fácil ser uno mismo despiadado, ya que, hay menos reglas. Irónicamente, el punto es comprobado por la historia del comunismo. La única razón por la cual Stalin llegó a la cima fue porque él era el más competente de los más despiadados. Si Peterson realmente estuviera diciendo lo que Fluss cree que está diciendo, Peterson sería un admirador de Stalin, lo que sin duda no es. De hecho, Peterson está diciendo algo muy diferente que Fluss no parece entender. Subir la escalera, y subirla bien, requiere cualidades que no se encuentran en la actitud estereotípica del "macho alfa agresivo". Resulta bastante cómico que Fluss prácticamente diga lo mismo que Peterson en la siguiente oración:
Peterson basa su cosmovisión en un ejemplo del reino animal; un ejemplo desmentido por otras instancias en el que los animales participan en ayuda mutua y cooperación.
Además del hecho de que sólo los humanos comparten intencionalidad y cooperan verdaderamente fuera de sus grupos familiares, Peterson hace este mismo punto, si Fluss se molestara en familiarizarse con lo que Peterson realmente dice. En varias de sus charlas, Peterson señala que incluso en el mundo de los chimpancés, los mejores machos alfa son aquellos que se llevan bien con su competencia. Si son demasiado tiránicos, los "machos beta" se unen para eliminarlos.

Imagina lo difícil que habría sido para una persona relativamente decente escalar los rangos de la estructura de poder soviética. Probablemente habría sido aplastado antes de que dejara el Komsomol. Si fuera realmente astuto, quizás podría llegar un poco más lejos en la jerarquía soviética. Pero incluso imaginando que pudiera llegar al círculo interno de Stalin, quedaría atrapado. En tal situación, las opciones son "seguir al líder" o sentirse desgraciado, o con una bala en la cabeza.

En una entrevista reciente, Peterson reflexionó acerca del significado del dicho en el Evangelio de Mateo, de que los "mansos" heredarán la tierra. Él señala que la palabra (del griego praotes, sinónimo de epieikeia) en realidad significa algo así como "aquellos que tienen espadas y saben cómo usarlas pero las mantienen envainadas". Probablemente una mejor definición sería "tener el derecho a la justicia, pero elegir no tomarla", pero la idea de la restricción sigue ahí. En Latín, la palabra es clementia, clemencia. Julio César tiene una mala reputación en estos días (sobre todo gracias al legado del siniestro Cicerón) pero pocos parecen recordar que él fue el primer romano conocido por su clemencia. César podía pelear y ha pasado a la historia como uno de los más grandes generales de todos los tiempos. Pero en una época en que los líderes como Sila podían redactar listas de proscripción que despojaban a sus enemigos políticos de todas sus propiedades y toda protección legal, con recompensas ofrecidas a cualquier informante cuya información llevara a la muerte de los proscritos (las cabezas decapitadas de las víctimas luego se exponían en el Foro público), César fue un parangón de virtud. También fue poeta, ingeniero, abogado, orador y maestro del latín. ¡El tipo inventó el libro y el periódico, por el amor de Dios!

César ciertamente tenía la capacidad de matar a sus enemigos y de adoptar las prácticas del dictador Sila, pero no lo hizo. Ascendió en la escala social de la sucia política romana sin convertirse en un monstruo. En lugar de eso, hizo de la misericordia y la gentileza (clemencia) su grito reagrupador, su nuevo "método de conquista". Él perdonó a sus enemigos, optando en su lugar por convertirlos en sus amigos. Era adorado por el pueblo romano, sus soldados, los judíos y las damas. También era un gran estadista. Pero incluso eso no fue suficiente. Fue traicionado por algunos de sus amigos más cercanos, en alianza con sus mayores enemigos. Él los perdonó, y ellos le pagaron apuñalándolo hasta la muerte durante una reunión del Senado. Fue el 22 de noviembre de 1963 de su tiempo. (Para una reevaluación izquierdista de la figura de César vea Assassination of Julius Caesar ["Asesinato de Julio César"], por Michael Parenti. Para una gran biografía, vea Education of Julius Caesar [Educación de Julio César], por Arthur Kahn.)

Todo esto demuestra que "escalar la escalera social" siempre ha sido un juego difícil. Es posible hacerlo bien, pero requiere habilidad y fuerza de carácter. Incluso entonces, es probable que te maten. Puede que no sea bonito, pero así es la vida. Cuanto más competente usted se vuelva, más responsabilidad asumirá.
Los escritos de Peterson son una mezcolanza del existencialismo cristiano, El arte del Negocio de Donald Trump y E.O. Wilson. Pero el principal problema filosófico es su concepción nietzscheana del poder. Sólo una voluntad fuerte, que es ejercida contra un mundo contingente y sin sentido (y contra los débiles) puede esperar florecer.
Esto es una tergiversación total. Peterson podría ser un fanático de Nietzsche, pero su concepción del poder no es el que confronta un mundo contingente y sin sentido, contra los débiles. Como Peterson mismo explica (parafraseado), es la visión de buscar lo que es mejor para usted, su familia y su sociedad, ahora y en el futuro. Más que cualquier cosa, Peterson defiende la 'voluntad de sentido' de Kierkegaard, y es precisamente esa defensa la que parece enfurecer a los ateos marxistas radicales como Fluss.

Después de unos pocos párrafos que alegan reproducir la crítica de Peterson a la "metafísica de la razón" (dudo de que el mismo Peterson estuviera de acuerdo con que estos representen sus puntos de vista) y critican esa crítica, Fluss resume lo que afirma que es la esencia de la "versión nietzscheana del cristianismo y el pecado original" de JBP:
Los fuertes heredarán el reino de los cielos, mientras que los débiles están destinados al fracaso.
Yo diría que esto depende de cómo defines fuerte y débil.
Cuando nosotros nos enfrentamos teóricamente a Peterson, necesitamos hacer más que refutar sus afirmaciones pseudocientíficas, su mala psicología pop y su versión histórica influenciada por la guerra fría. El verdadero desafío es superar su irracionalismo fundamental.
Me da curiosidad saber quiénes podrían ser ese "nosotros". Y cómo enfrentar a Peterson "teóricamente". Asumiré que no significa refutar a "hombres de paja", pero eso parece ser lo que ese "nosotros" hacen mejor.
Nuestra tragedia como seres humanos es mucho más banal que el romanticismo de Peterson. Sí nos enfrentamos contra un irracionalismo fundamental, pero no proviene de un mundo intrínsecamente incognoscible y misterioso. Más bien, proviene del capitalismo.
Ahí lo tienen, gente. Si se encuentran con Buda en el camino, hágale saber: la fuente de toda la tragedia humana es en realidad el capitalismo.
La filosofía de Peterson refleja la naturaleza brutal de la exigencia irracional de que sacrifiquemos a los seres humanos por las ganancias, lo cual él transforma en un llamado a que todos los individuos se sacrifiquen a sí mismos por algo trascendente y sagrado. En otras palabras, Peterson intenta latinizar el kitsch burgués con llamadas mediocres de autorrealización. Pero el yo se realiza: se le dice que debe matar o ser matado por la competencia interminable del capitalismo.
Pensé que Cathy Newman era mala. Pero esto está tan alejado de cualquier cosa que realmente dice Peterson que es alucinante. Pero, oiga, quizás sea sólo yo. Quizás de acuerdo con la lógica del materialismo histórico, aprender a limpiar tu habitación, asumir tu responsabilidad personal, sacrificar placeres a corto plazo por el bienestar a largo plazo y preparar las bases para un futuro mejor es en realidad un asesinato.
Irónicamente, la crítica de Peterson al postmodernismo es en sí misma muy postmoderna. Su descripción del postmodernismo como una nueva forma de "materialismo dialéctico" que ejerce un control de pensamiento totalitario no sólo se hace eco de las polémicas de la Guerra Fría contra el marxismo, sino también de ciertas tendencias dentro del postmodernismo francés. Estos relatos, como los de Lyotard, acusan a la Ilustración, a la dialéctica hegeliana y a Marx de construir "metanarrativas" sobre una realidad irreductiblemente compleja. Peterson comparte el temor de los postestructuralistas franceses de que la razón se presta a una lógica de dominación. De hecho, Peterson recapitula el influyente rechazo de Heidegger al "Yo Cartesiano" como el lanzamiento de una nueva etapa de nihilismo civilizador.
Quizás Peterson ha expresado en algún lugar su temor de que "la razón se presta a una lógica de dominación", pero yo personalmente nunca lo he escuchado expresarse de tal manera. Por lo que puedo ver, Peterson es en realidad un firme defensor de la razón. No se puede tener verdad y logos sin razón. El mundo es inteligible, y algunas conceptualizaciones son más precisas que otras, aunque acercarse a la verdad absoluta pueda parecerse un poco a la paradoja de Zeno, donde uno puede acercarse a la línea de meta pero sin lograrlo enteramente.

Pero estoy de acuerdo en que la crítica de Peterson al postmodernismo es en realidad postmoderna, sólo que tal vez no de la manera en que Fluss cree que es. Sí, Peterson se opone al rechazo de la realidad y la verdad por parte del postmodernismo. Pero el modernismo también tuvo sus problemas; problemas que llevaron directamente hacia los problemas del postmodernismo, incluyendo su propia racha de antirracionalismo en la forma de contradicciones performativas (negar en el discurso lo que afirmas por acción). Ese divorcio de la teoría y la práctica fue en gran parte el resultado de las ideas erróneas del modernismo sobre la primacía absoluta de la percepción sensorial y una concepción mecanicista y sin valor de la naturaleza que conduce a la incapacidad de defender la existencia de la causalidad, el mundo y los valores, entre otras cosas.

Sin entrar en detalles, simplemente recomendaría a los lectores interesados que revisen el libro de David Ray Griffin, Whitehead's Radically Different Postmodern Philosophy ("La filosofía postmoderna radicalmente diferente de Whitehead"). La filosofía de Whitehead fue un intento de reconciliar la ciencia con "nuestras instituciones estéticas, morales y religiosas". Ni el modernismo ni el postmodernismo tuvieron éxito en eso. Creo que Whitehead fue el que más se acercó. El intento de Peterson de reconciliar la ciencia y la religión es un esfuerzo en la misma dirección. (Por cierto, muchos de nosotros aquí en SOTT leímos el libro Explaining Postmodernism, de Stephen R. Hicks, luego de escuchar que Peterson lo recomendara. Puede ver nuestra entrevista con Hicks en The Truth Perspective.)
Cualquier intento de confrontar la cosmovisión de Peterson debe desplegar el legado de la razón dentro de los propios compromisos del marxismo con la lógica dialéctica y la libertad humana. Pero no podemos limitarnos a componer polémicas filosóficas o desmitificar los numerosos errores científicos e históricos de Peterson. La lucha contra la reacción no comienza en la oficina editorial liberal sino en organizar una lucha concreta.
Para un tipo que parece tener problemas con realidades como la competencia, la pelea y el conflicto, Fluss es tremendamente combativo. Tal vez debería controlar su agresión de macho alfa y tratar de tener una conversación.
La narrativa de Peterson reduce el sentimiento izquierdista al resentimiento, la envidia y la ira entre los "perdedores" de la sociedad.
No, de hecho, Peterson ha hablado en repetidas ocasiones de la necesidad de que la izquierda sea una voz para la clase trabajadora. El problema con una gran parte del sentimiento izquierdista, sin embargo, es que está basado en el resentimiento, la envidia y la ira, y no en una preocupación genuina por los muchachos que reparan las líneas eléctricas.
Esto se hace eco de la desestimación de George Orwell de los socialistas británicos como simplemente llenos de esplín y bilis contra los ricos; Peterson compara el análisis de la izquierda en The Road to Wigan Pier, de Orwell, con la crítica de Nietzsche a la moral esclavista. Orwell rechazó las "manivelas" socialistas, una categoría que incluía a los feministas, en favor de un enfoque de sentido común que atraía a la clase media educada, un análisis que lo empujó a la derecha hacia finales de su vida.
Y quizás Orwell estaba en lo cierto. Quizás estaba en lo cierto en muchas cosas.
Nosotros debemos rechazar la caracterización de la base de admiradores de Peterson como personas normales que están hastiadas y cansadas de la izquierda políticamente correcta; esta suposición simplemente repite el desdén de Nietzsche por los conflictos comunes de los oprimidos, incluidos los conflictos de las minorías raciales, las mujeres y las personas LGBTQ.
Ahí está de nuevo ese "nosotros" colectivo Borg, sin preocupación por la realidad empírica. El hecho es: muchos (¿la mayoría? de nuevo, me encantaría ver las demografías de Fluss) de los admiradores de Peterson son personas normales que están hastiadas de la cultura de lo políticamente correcto. Pero los hechos no importan. "Nosotros" debemos rechazar esa caracterización no porque "nosotros" tengamos una buena razón para hacerlo, sino simplemente porque hacer lo contrario podría desafiar nuestra problemática política de identidad.
Acepta un estándar de normalidad tal como lo definen los medios convencionales o, peor, la derecha alternativa misma. Por ejemplo, el rechazo de Peterson a respetar a las personas que usan diferentes pronombres para expresar su identidad no es un problema menor, sino uno central para reconocer la humanidad de las personas transgénero.
Este tipo es insoportable.

Peterson no habla en favor de lo que es "normal". Su jerga de autenticidad (de que es simplemente un académico peleando por la verdad en medio de tanta corrección política y censura) enmascara sus ideas autoritarias.
Maldita sea, es hora de memes.


Vídeo: "Y sigues usando esa palabra. No creo que signifique lo que tú crees que significa".
Él llama al marxismo una "ideología asesina," ...
...pero sus políticas conspiratorias y paranoicas son difíciles de distinguir de las denuncias al marxismo cultural por parte de la derecha alternativa. De hecho, la línea entre el autoritarismo de Peterson y el paleonazismo de Richard Spencer es borrosa.

Vídeo: "Todo el mundo que no me cae bien es Hitler. La guía millennial para la política de los tiempos modernos".
En su apelación a los liberales de clase media, la mejor coartada del reaccionario siempre ha sido el anticomunismo militante.
Y en su oración final, Fluss ha perdido por completo la trama, aunque eso no significa que no lo veamos pronto en medio de una marcha antifascista, rompiendo ventanas y golpeando a la gente.