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La roca espacial se acercó a una distancia de 12 mil 230 kilómetros sobre la superficie del planeta. Pasó encima del Océano Atlántico sur cuando registró su mayor aproximación. Siempre existió certeza de que no chocaría con la Tierra, pero a escala astronómica, 12 mil 230 kilómetros es poco, unas tres veces la distancia entre Los Ángeles y Nueva York.

El asteroide fue descubierto la semana pasada mediante telescopios en Nuevo México. Tiene una anchura de 4.5 por 18 metros.

Los científicos aseguran que asteroides de este tamaño se acercan a la Tierra cada seis años. A principios de año, una roca espacial más chica se acercó a 5 mil 471.5 kilómetros del planeta. "Incluso si el más reciente se hubiera dirigido derecho hacia nosotros, se hubiera desintegrado en la atmósfera y no hubiera ocasionado daños en tierra".

"Apenas nos estamos percatando del hecho que la madre naturaleza ha estado disparando estas cosas durante milenios", dijo Don Yeomans, quien encabeza el programa que rastrea rocas espaciales peligrosas en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California.

Se suponía que sería suficientemente brillante para que alguien pudiera verlo con un telescopio mediano. Los asteroides son residuos de la formación del sistema solar hace aproximadamente 4 mil 500 millones de años. Partes de asteroides - meteoritos - constantemente se separan y atraviesan la atmósfera.

Objetos de más de un kilómetro son exterminadores mayores que golpean la Tierra cada varios cientos de miles de años. Los científicos creen que fue un asteroide de 10 kilómetros de ancho el que causó la desaparición de los dinosaurios hace 65 millones de años.