El alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, ha hecho una valoración preliminar "con todas las cautelas" y ha señalado que las causas apuntan a un escape de gas.
El País
© El País
Una fuerte explosión ha destrozado parcialmente minutos antes de las tres de la tarde de este miércoles un edificio situado en el centro de Madrid causando al menos tres muertos, además de once heridos, según ha confirmado el delegado del Gobierno de la Comunidad, José Manuel Franco, y fuentes del Ayuntamiento. El alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, ha hecho una valoración preliminar "con todas las cautelas" desde la zona. El regidor ha señalado que las causas apuntan a un escape de gas, que ha volado las cuatro plantas superiores del inmueble situado en el número 98 de la calle de Toledo, a menos de un kilómetro de la plaza Mayor. [Información en directo sobre la explosión en el centro de Madrid | Las imágenes de la explosión]


El lugar afectado está situado en el distrito Centro, muy cerca de la Puerta de Toledo y junto a la iglesia Virgen de la Paloma y el colegio concertado La Salle-La Paloma. En las inmediaciones hay también una residencia de ancianos, Los Nogales La Paloma, donde en un primer momento se ha situado por error el suceso. Según el primer balance realizado por Emergencias y la información facilitada por el Arzobispado de Madrid, dos de los fallecidos son una mujer de 85 años que iba caminando por la calle y David Santos Muñoz, electricista de 35 años, padre de cuatro hijos y feligrés de la parroquia que "había ido a echar una mano".

Fuentes policiales indican que el incidente se produjo mientras se revisaba la instalación en la parte posterior del edificio, un centro parroquial de la Iglesia de la Virgen de la Paloma, que tiene despachos, un centro de acogida de Cáritas, salas de reuniones, un salón y tres viviendas para sacerdotes. El delegado del Gobierno, José Manuel Franco, ha señalado que, en cuanto sea posible, entrarán los perros de la policía para detectar la presencia de personas en el interior.

"Los bomberos van a ver si se han producido daños en el muro colindante que hay entre esa construcción que ha explosionado y el de la residencia de ancianos. Asimismo, han caído cascotes al patio del colegio que está anexo al bloque", ha señalado Almeida.

En estos momentos, el edificio "está incendiándose por dentro, pero no se considera prudente intervenir por parte de los bomberos. En caso de apagarlo podría producirse un embalsamiento de gas que podría afectar muy gravemente a la estabilidad del inmueble", ha indicado el regidor madrileño, que ha confirmado que sus plantas superiores "tendrán que ser objeto de derrumbe controlado". La policía ha hecho un llamamiento a los ciudadanos para que no se acerquen a la zona, en el corazón de la capital.

Los heridos más graves son un varón de 26 años, que ha sido trasladado al hospital de la Paz en estado moderado-grave; otro varón de 53 años con traumatismo craneal que está siendo tratado en el hospital Ramón y Cajal con pronóstico leve y un tercer hombre, de 29 años, que sufre una fractura en el peroné con pronóstico reservado y que se encuentra en el hospital Clínico. También se ha traslado a un varón de 27 años con herida en el tobillo a la Fundación Jiménez Díaz para realizar una exploración completa. Además, dos policías nacionales, también con heridas leves, que se encuentran en la clínica Nuestra Señora América.

Los mayores de la residencia no van a dormir este miércoles en ella y, desde el hotel cercano en el que se han resguardado, han sido trasladados por el Samur a otros centros del grupo Los Nogales. Se trata de la residencia Imperial, en la calle de Santa María la Real de Nieva, y en la residencia Pontones, en la calle de Cobos de Segovia. A los familiares se les está indicando que acudan a estos lugar para encontrarse con los mayores afectados.

Nueve dotaciones de Bomberos de Madrid y 11 unidades de Samur se han desplazado al lugar, que está acordonado por la policía. Los agentes han desalojado a vecinos y viandantes. "Estábamos a 400 metros y he escuchado la explosión. Nos han evacuado a todos los residentes", afirma Juan Miguel Estepa, trabajador de la residencia Los Nogales. Una mujer que acababa de bajar del autobús cuando oyó la explosión, a escasos 50 o 100 metros, ha explicado que vio "un cuerpo tendido en el suelo", aunque no se atreve a decir si era un herido o un fallecido. Poco después, esta profesora empezaba sus clases online y llegó a su casa, en la plaza de Cascorro, temblando del susto.

Paula Moran, de 16 años, también estaba en su casa, en la calle del Concejal Benito Martín Lozano, cuando ha escuchado el fuerte estruendo. "Pensaba que era un petardo, pero todo el mundo se ha asomado y hemos bajado todos en mi familia", cuenta en la Puerta de Toledo.

"Vivo justo enfrente. Estaba haciendo la comida en la cocina de mi casa cuando ha sonado un tremendo estruendo. Al escuchar el ruido, me he asomado al salón por la ventana y he visto cómo reventaba el balcón del salón hacia dentro", cuenta todavía en estado de shock Rodrigo Verano, de 37 años, que ha resultado milagrosamente ileso. "Estoy perfectamente", dice sin salir de su asombro por la suerte que ha tenido. Los restos del balcón, "cascotes, cristales y mampostería", han caído encima de su mesa, en la que estaba trabajando poco antes. Tras la explosión, "ha temblado todo el bloque durante 15 segundos" y se ha asomado a la calle. "Entre la polvareda, he visto el edificio en llamas". Verano y otros vecinos de su bloque han salido a calle a ver qué había ocurrido, pero la policía les ha pedido que regresaran a sus casas, donde se encuentran a la espera.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha ofrecido su total colaboración al Ayuntamiento de la capital y ha lamentado los "duros episodios" que está pasando tanto la ciudad como la región. "Ahora lo que toca es esperar, va a ser una tarde, imagino, que larga, hasta que los Bomberos consigan entrar al final del edificio y saber qué ha ocurrido", ha apuntado. La presidenta ha estado con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; el delegado del Gobierno, José Manuel Franco; el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y algunos concejales del Ayuntamiento en una base operativa. Hasta el lugar en la calle de Toledo se han desplazado también los portavoces municipales de Más Madrid, Rita Maestre, y del PSOE, Pepu Hernández, además de otros responsables del equipo de Gobierno de PP y Ciudadanos.