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Las lluvias torrenciales provocaron extensas zonas inundadas, matando a una persona y obligando a miles de personas a evacuar sus hogares, informó la agencia de noticias dpa.
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Las lluvias que provocaron la crisis de las inundaciones del mes pasado en el estado australiano de Nueva Gales del Sur (NSW) fueron más del doble de la media, convirtiéndolo en el segundo marzo más lluvioso del que se tiene constancia, según informó el jueves la Oficina de Meteorología (BoM).

Las lluvias torrenciales provocaron extensas zonas de inundación que causaron la muerte de una persona y obligaron a miles de personas a evacuar sus hogares, informó la agencia de noticias dpa.

Se calcula que la catástrofe ha causado daños por valor de 2.000 millones de dólares australianos (1.500 millones de dólares), según el Australian Financial Review.

Aunque la lluvia había remitido y las aguas de las inundaciones estaban bajando, la semana pasada unos 20.000 residentes seguían sin poder regresar a sus casas.

Desde que empezaron las inundaciones, los servicios de emergencia del estado recibieron más de 23.000 llamadas de ayuda del público, y los voluntarios han atendido más de 13.000 trabajos, informó la agencia de noticias AAP.

En el punto álgido de la crisis, las comunidades de la costa media norte de Nueva Gales del Sur se enfrentaron a las peores condiciones de inundación desde 1929.