
© REUTERS/Alexsey Druginyn/RIA Novosti/Pool
Dmitry Medvedev aparece intercambiando sonrisas confidenciales con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, mientras una música siniestra suena de fondo. El cadáver del aliado ruso Muamar el Gadafi, derrocado por rebeldes ayudados por Occidente, es arrastrado por el suelo. Una cámara enfoca al primer ministro, sudando y cambiando de postura incómodo en una silla.
Un narrador pronuncia la palabra "traición".
Un vídeo colgado en Internet que dura más de una hora utiliza métodos que recuerdan a la antigua Unión Soviética para vituperar al primer ministro, situado ya a la sombra del presidente Vladimir Putin.