Buenos Aires, 17 may (PL) El golpe de Estado consumado institucionalmente en Brasil también es un intento por desbaratar el Grupo Brics como parte de una geopolítica del gobierno norteamericano, consideró hoy el presidente venezolano, Nicolás Maduro.

En respuestas a preguntas de periodistas argentinos por vídeoconferencia desde Buenos Aires en una comparecencia de prensa internacional, Maduro estimó que Washington se afana en recomponer su capacidad de influencia perdida en los últimos 10 años.
nicolas maduro
© REUTERS/ Carlos Garcia Rawlins
Con esa "geopolítica imperial se ha planteado retomar Nuestra América como su patio trasero, y con ello volver a retomar su influencia sobre nuestros recursos naturales", aseveró.

A escala mundial -añadió- busca acosar y acorralar a Rusia, a China, "y destruir esa creación maravillosa de los BRICS. Es parte de la geopolítica de Washington", recalcó.

El mandatario venezolano hizo referencia al cuadro de países que forman Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, y su nuevo esquema de relaciones más justas que propulsan.

Por eso -afirmó- "el golpe de Estado en Brasil es un golpe contra Sudamérica, contra América Latina y el Caribe, pero sobre todo es un golpe también contra los BRICS".

Su objetivo es frustrar -agregó- el esquema de un nuevo sistema financiero, de una nueva estructura monetaria, así como hacer malograr la unión de esas cinco potencias emergentes.

Con ello quieren desarticular "un proyecto de un mundo nuevo de los que queremos independencia, de los que queremos justicia", remarcó Maduro.

Los periodistas argentinos también requirieron su opinión sobre si se ejecuta un Plan Cóndor de nuevo tipo en Sudamérica, sobre lo que asintió que efectivamente se gesta esa operación "con gran carga de ofensiva mediática, hostilidad económica, violencia y confabulaciones políticas".

Para ello -puntualizó- aprovechan las estructuras institucionales para avanzar contra los proyectos populares que luchan y se esfuerzan por el bienestar de los pueblos.
"Pero no podrán. Creo que una nueva ola revolucionaria se está preparando, se está gestando y está madurando en América del Sur y en América Latina. La impulsarán los pueblos", dijo.
Y se preguntó: "¿Quién va a callar a los obreros, a los campesinos, a los hombres y mujeres de nuestros barrios, a la juventud universitaria y del secundario, a los intelectuales, a los artistas, quién va a callar a la conciencia de las fuerzas armadas fundada en los idearios de Bolívar, San Martín, Artiga, Alfaro, quién nos va a tapar, nos va a desaparecer?"

Tal vez, tengan algunas victorias tácticas, "pero estoy seguro que por sus propias acciones, esta gente nunca va a retornar", pronosticó.

Hay que preguntarse -cuestionó- qué ofrecen: el neoliberalismo como alternativa, privatizar la salud, la seguridad social, flexibilizar el empleo, botar a los trabajadores, congelar los salarios, "entregarnos al Fondo Monetario Internacional otra vez y que nos convirtamos nuevamente en esclavos del capital mundial?"

Para el presidente venezolano, los pueblos ganarán a la postre esta batalla.

En la rueda de prensa con periodistas acreditados en Caracas y en videoconferencia desde otras capitales del mundo, Maduro denunció que Venezuela y su gobierno son blanco de una intensa y virulenta campaña mediática cuyo eje descansa en Madrid, Washington y Miami.