diabetes
Hay dos principales tipos de diabetes, y el número de personas diagnosticadas con cualquiera de ellas continúa creciendo cada año. En la primera, la diabetes tipo 1--también conocida como diabetes dependiente de insulina--el páncreas deja de producir insulina por completo.

Los investigadores aun intentan determinar las razones por las que podría ocurrir esto. Posiblemente es el resultado de una predisposición genética, deficiencia de vitamina D, microbioma intestinal desequilibrado, exposición a un virus o una combinación de estos y otros factores.

Si padece diabetes tipo 2, a menudo el cuerpo continúa secretando insulina durante varios años, pero sus células se resisten a utilizarla, lo que ocasiona que haya niveles más elevados de azúcar en la sangre. Esto también es denominado resistencia a la insulina.

Frecuentemente, la diabetes tipo 2 inicia de manera paulatina, mientras que la diabetes tipo 1 ocurre de repente. Si padece diabetes tipo 1, el páncreas podría dejar de secretar insulina por completo en cuestión de días, lo que resulta en niveles peligrosamente altos de azúcar en la sangre, que pueden ser letales.

La previa investigación ha demostrado que hacer ejercicio ayuda a controlar los niveles de glucemia en las personas que padecen diabetes tipo 2, que es la forma más común.

En una pequeña muestra de un reciente estudio de colaboración entre científicos de Italia y Florida, los investigadores demostraron que hacer ejercicio aeróbico también puede afectar el control de la glucemia en personas que padecen diabetes tipo 1.

¿Como la Diabetes Afecta a Su Cuerpo?

De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), cada cinco minutos, 2 personas mueren por una causa relacionada con la diabetes y 14 adultos más son diagnosticados. La diabetes tipo 1 es más comúnmente diagnosticada en personas menores de 20 años de edad, y a menudo en niños menores de 10 años de edad.

La tasa más alta de diagnósticos se presenta en niños blancos no hispanos, que son menores de 10 años, donde la tasa es casi el 3 %. Un mal control glucémico en el cuerpo tiene un efecto acumulativo, así que entre más temprano afecte a una persona esta enfermedad, posiblemente tenga un mayor daño.

Con el fin de controlar sus niveles de azúcar en la sangre, las personas que padecen diabetes tipo 1 necesitan ser inyectadas con insulina regularmente, ya sea durante todo el día, o a través de una bomba de insulina, para obtener aproximadamente el rango natural de insulina en el cuerpo.

Utilizar una bomba reduce consistentemente los niveles máximos de insulina y niveles inferiores de azúcar en la sangre que ocasionan las inyecciones, y el daño en los vasos sanguíneos es minimizado.

Con el paso del tiempo, el daño en el sistema arterial podría ocasionar una enfermedad cardíaca, derrame cerebral, presión arterial alta, daño renal u ocular, pérdida de la vista, enfermedad vascular periférica y amputación.

Los costos médicos totales, directos e indirectos, en los Estados Unidos--estimados por los CDC, tanto para la diabetes como para las afecciones médicas concurrentes--ascienden a unos alarmantes US$ 245 billones.

Cómo Y Por Qué Ocurren Problemas Médicos Secundarios en la Diabetes

Comprender cómo ocurren los problemas médicos secundarios en la diabetes tipo 1 o tipo 2 podría ayudar a motivarle a controlar sus niveles de azúcar en la sangre, al llevar una alimentación baja en carbohidratos, hacer ejercicio y utilizar apropiadamente la insulina.

Aunque en teoría, inyectar insulina para "cubrir" la cantidad de carbohidratos que consume en sus alimentos reduce sus niveles de azúcar en la sangre, esto no detiene el daño arterial.

El hecho de que aumenten levemente los niveles de azúcar en la sangre no causa los síntomas, por lo que muchas personas que padecen diabetes tipo 2 o prediabetes podrían no saber que tienen la enfermedad.

Sin embargo, muy a menudo las personas con diabetes tipo 1 experimentan unos rápidos y repentinos elevados niveles de azúcar en la sangre al momento del diagnóstico, lo que podría ser fatal. Tener niveles elevados, podría ocasionar una visión borrosa, dificultad para hablar y deshidratación.

Los efectos secundarios de la diabetes en la salud podrían ser el resultado de un menor suministro sanguíneo al órgano o un mayor nivel de presión requerida para la oxigenación. Esto podría desarrollarse conforme las arterias "se endurecen" y se vuelven menos flexibles.

Este endurecimiento es denominado aterosclerosis, y es una enfermedad común en la diabetes, que ocasiona daño renal, ocular, cardiaco y en el sistema vascular periférico. Exactamente, la manera en que los niveles elevados de glucosa en la sangre aumentan su riesgo de aterosclerosis, podría estar relacionado con varios factores.

Estudios previos han demostrado que la glucosa en la sangre aumenta la producción de radicales libres,6daña el revestimiento de los vasos sanguíneos y otros organos. Esto reduce la producción de óxido nítrico responsable de relajar las paredes arteriales y disminuir la presión requerida para bombear la sangre.

Por el contrario, hacer ejercicio produce una fuerza física en sus arterias, capaz de cambiar los procesos bioquímicos. De acuerdo con el Dr. Jun-ichi Abe, el autor del estudio y profesor asociado de la Universidad de Rochester Medical Center:
"La inflamación de los vasos sanguíneos es uno de los principales impulsores de la aterosclerosis, y padecer diabetes lo empeora. Nuestro estudio sostiene que un proceso que envuelve a una enzima esencial de señalización, protege al corazón en casos normales, y es saboteado por las sustancias químicas producidas por la diabetes".
¿Qué Tanto Dañan los Niveles Elevados de Azúcar en la Sangre y Cuanto le Ayuda Hacer Ejercicio?

Si no padece diabetes, tener un flujo sanguíneo rápido causado por hacer ejercicio libera una enzima llamada quinasa 5 extracelular regulada por señalización (ESRK5, por sus siglas en inglés), que posteriormente señaliza un proceso para aumentar la producción de óxido nítrico.

Este estudio mostró que las personas que padecen diabetes producen moléculas que inhiben la producción de ESRK5, y posteriormente la producción de óxido nítrico.Este proceso contribuye al desarrollo de la aterosclerosis en personas que padecen diabetes.

En un estudio diferente, los investigadores del Colegio de Medicina de Georgia encontraron que el 5 % de azúcar que no es convertido en energía por las células, en vez de ello se convierte en un tipo de azúcar que puede modificar la proteína, O-GlucosilNAcetilación (O-GlcNAc, por sus siglas en inglés).1

Al haber una mayor actividad de O-GlcNAc en las personas con altos niveles de azúcar en la sangre, esto compite con el proceso que también produce óxido nítrico, que finalmente, reduce la tensión en el sistema arterial, y por lo tanto, disminuye la presión arterial.

Asimismo, la investigación adicional descubrió una interacción entre el ácido graso necesario para unir al óxido nítrico con las paredes arteriales y la diabetes.

El óxido nítrico se adhiere a la membrana interna de las paredes arteriales a través de una forma común de ácidos grasos (palmitato), que se encuentra en su sistema. Sin embargo, aunque esta forma es común, el óxido nítrico solo utiliza el palmitato que es sintetizado por la sintasa de ácidos grasos (FAS, por sus siglas en inglés), una enzima que se encuentra en su cuerpo y es regulada por la insulina.

Si bien es claro que tener niveles elevados de azúcar en la sangre afecta negativamente a su sistema arterial y aumenta el riesgo de pequeños y grandes daños en los vasos, lo que no está claro son las diversas formas en que esto ocurre.

El Impacto del Ejercicio Sobre el Control del Azúcar en la Sangre en la Diabetes Tipo 1

En un pequeño estudio realizado durante tres meses, los investigadores observaron el efecto de hacer ejercicio aeróbico en las personas que padecían diabetes tipo 1. Encontraron que los participantes que incluían ejercicios aeróbicos en sus actividades diarias disfrutaban de un mejor control metabólico y tenían un más bajo requerimiento de insulina a lo largo del día.

Los participantes eran de mediana edad, pacientes que padecían diabetes tipo 1 y utilizaban una bomba de insulina. El Dr. Livio Luzi del Instituto de investigación de diabetes en la Universidad de Miami, dijo:
"Hemos encontrado que tener actividad física puede mejorar el control glucémico en pacientes que padecen diabetes tipo 1 (T1D, por sus siglas en inglés).
Nuestros resultados sugieren que un programa educativo dirigido a los pacientes T1D, y enfocado en monitorear el suministro de insulina, alimentación y ejercicio, es muy beneficioso para controlar la T1D".
Los participantes que hicieron ejercicio también experimentaron menos episodios de hiperglucemia, o mayores niveles de glucosa en la sangre que superaron su objetivo.

Si bien, hacer ejercicio aeróbico puede reducir los niveles de glucosa en la sangre, el ejercicio anaeróbico (sin oxígeno) tiende a aumentar sus niveles de glucosa.1Hacer ejercicio mientras intenta contener la respiración, como por ejemplo al hacer un entrenamiento de resistencia, o respirar con dificultad, podría situarle en un estado anaeróbico.

En otro análisis de varios estudios de investigación que evaluó la eficacia de hacer ejercicio y el control de la glucosa en una población pediátrica, los investigadores encontraron información conflictiva.

Tres de los cuatro estudios con una población total de más de 400 pacientes combinados, demostró que hacer ejercicio mejoró el control glucémico, al contrario del estudio número cuatro.

Considere Hacer Estos Ejercicios Para Equilibrar Su Nivel de Azúcar en la Sangre

Una persona que padece diabetes tipo 1 y hace ejercicio, se enfrenta a desafíos únicos. Antes de comenzar un programa de ejercicios, es importante tomar algunas medidas. Si todavía no lo hace, utilice un diario para registrar su consumo de alimentos, uso de insulina, niveles de glucosa en la sangre y hábitos actuales de ejercicio.

Esté atento a los constantes cambios en sus niveles de glucosa relacionados con el número de carbohidratos, proteínas y grasas que consume, en combinación con el nivel de ejercicio que realiza actualmente. Lo utilizará para ayudarse a predecir los niveles de glucosa conforme comienza a aumentar su nivel de ejercicio aeróbico.

Siempre haga ejercicio con un compañero. Tener una precipitada disminución de glucosa en la sangre puede ser fatal. Es más seguro hacer ejercicio con alguien que pueda reconocer los síntomas de bajos niveles de azúcar en la sangre y sea capaz de abordar sus síntomas adecuadamente.

Elija los ejercicios aeróbicos que se adapten a sus actuales capacidades de aptitud física. Recuerde incluir aquellas actividades que es posible que no considere como ejercicios aeróbicos, pero que podrían afectar sus niveles de azúcar en la sangre, como la jardinería.

Comience lentamente para reducir la posibilidad de lesiones que puedan dejarle inhabilitado durante semanas. Es posible que se sienta emocionado por iniciar un nuevo programa de ejercicios, pero es importante que tenga paciencia. Mantenga un diario regular y monitoree sus resultados metabólicos durante ese período de tiempo. Podría encontrar que una actividad en particular—más que otra--impacta el control de la glucosa de manera significativa.

No importa su edad o capacidad física, hay ejercicios aeróbicos que podría realizar. Su objetivo inicial es aumentar su frecuencia cardíaca entre 20 y 30 minutos todos los días. Encuentre un compañero que entrene en su mismo nivel, para que este ejercicio sea retador para ambos. Enseguida está una breve lista de posibles tipos de ejercicio físico que podrían resultarle interesantes.
  • Jardinería
  • Yoga
  • Caminar
  • Trotar
  • Correr
  • Remar
  • Entrenamiento elíptico
  • Natación
  • Aerobics acuáticos
  • Ciclismo
  • Clases de aeróbics
  • Tenis
  • Baloncesto
  • Futbol
  • Baile
  • Raquetbol
  • Ping-pong
  • Golf
  • Senderismo
  • Esquí a campo traviesa (o de fondo)
  • Calistenia
  • Salto de cuerda
  • Subir escaleras
  • Kick boxing
Los Científicos Continúan Buscando los Desencadenantes de la Diabetes Tipo 1

La diabetes tipo 1 es una enfermedad compleja que no solo tiene un factor desencadenante. Los científicos tienen la teoría de que algunas personas pueden tener un mayor potencial genético de desarrollar diabetes tipo 1, en combinación con una respuesta inmunológica.

Otros teorizan que un virus provoca una insuficiente secreción de insulina en el páncreas,18 y otros vinculan la diabetes tipo 1 con una deficiencia alimenticia.

Lo más probable es que cada uno de estos factores, y más, podrían desempeñar un papel en el desarrollo de esta compleja enfermedad, para la que no existe una cura conocida.

Ya sea que actualmente padezca diabetes tipo 1 o si tiene una predisposición hereditaria, existen diversas medidas alimenticias que puede tomar, junto con la información que se conoce hoy en día, para mejorar su resultado.

Su microbioma intestinal está muy involucrada con su sistema inmunológico. Los científicos han descubierto que los pacientes que desarrollan diabetes tipo 1, atraviesan una fase prodrómica subclínica de la enfermedad, durante la cual no se presentan síntomas clínicos.

Los descubrimientos de la investigación inicial han determinado que el microbioma intestinal de las personas que posteriormente desarrollan diabetes tipo 1 es diferente al de las personas que no les sucede esto.

La investigación que demuestra el cambio de composición en las bacterias intestinales no es nueva

Sin embargo, un reciente estudio25 encontró una relación entre el desarrollo de nuevas colonias intestinales y los cambios en el sistema inmunológico, lo que podría implicar el crecimiento bacteriano con una progresión de la autoinmunidad de las células B, en vez de un desarrollo de la enfermedad.

Es importante incluir alimentos fermentados en su alimentación diaria, para mejorar la variedad de bacterias intestinales. También, puede considerar utilizar un suplemento probiótico de calidad, para mejorar su microbioma intestinal.

Puede obtener más información sobre este proceso en mi artículo anterior, "Una Investigación Revela la Importancia de su Microbioma para Tener una Salud Óptima".

Los estudios han determinado que los niños infectados por enterovirus tienen un riesgo mucho mayor de desarrollar diabetes tipo 1, en comparación con los que no han tenido esta infección. Un segundo estudio demostró resultados similares.

Los investigadores encontraron un tipo de enterovirus en las células pancreáticas, que produce insulina en los pacientes que fueron recientemente diagnosticados con diabetes tipo 1.

El Rol de la Vitamina D

La vitamina D también desempeña un rol en el desarrollo de la diabetes tipo 1 y en el riesgo general de muerte por la enfermedad. Para empezar, la vitamina D desempeña un papel vital en la eficiencia de su sistema inmunológico.

Ya que un posible factor en el desarrollo de la diabetes tipo 1 ocurre en respuesta a un agente infeccioso, es lógico pensar que mantener niveles óptimos de vitamina D ayudará a reducir la posibilidad de desencadenar esta enfermedad.

Los estudios han demostrado que tener bajos niveles de vitamina D podría aumentar en un 50 % el riesgo de desarrollar diabetes tipo 1 en su etapa adulta.30

Al utilizar muestras sanguíneas del personal militar en servicio activo, los investigadores identificaron 310 personas diagnosticadas con diabetes tipo 1 durante un período de 12 años . Compararon las muestras tomadas antes de la aparición de la enfermedad con las de 600 personas del servicio militar que no padecían la enfermedad.

Las personas con niveles más altos de vitamina D tuvieron la mitad del riesgo de desarrollar la enfermedad que las que tenían niveles más bajos. Al parecer, las personas que padecían diabetes tipo 1 y tenían bajos niveles de vitamina también aumentaron su riesgo de muerte por cualquier causa.

Como señaló la autora principal del estudio, Kassandra Munger, investigadora asociada en el departamento de nutrición de la Facultad de Salud Pública de Harvard:
"Es sorprendente que una enfermedad grave, tal como la diabetes tipo 1, posiblemente pueda ser prevenida a través de una sencilla y segura intervención