En otro espeluznante ataque de perros, un hombre de 60 años de Lichtenburg, en el noroeste del país, murió mutilado por sus propios perros el fin de semana.
La policía ha abierto un sumario para investigar las circunstancias del suceso.
Según el portavoz de la policía, Sam Tselanyane, la mujer del fallecido estaba ocupada al otro lado de la casa cuando oyó ladrar a los perros.
"No se molestó en ir a ver qué pasaba, ya que su casa está situada en una calle muy transitada y los perros ladran con frecuencia a los peatones y a los vehículos que pasan por allí. Además, cuando se restableció el suministro eléctrico, entró en la casa en busca de su marido, pero no lo encontró", explica Tselanyane.
Al continuar la búsqueda, la mujer vio a su marido inmóvil en el jardín.
"Entonces salió rápidamente y descubrió que su marido había sido mordido por sus perros, dos de raza staffie o pitbull y uno de raza desconocida. Se llamó a la policía y a los Servicios de Rescate Médico de Emergencia y se certificó la muerte del hombre en el lugar de los hechos."
También se llamó a la Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (SPCA), que ya ha retirado a los tres perros del local.
El ataque se produce tras una serie de incidentes, entre ellos muertes de niños y lesiones graves, registrados en los últimos meses en toda Sudáfrica.
Algunas organizaciones y partidos políticos han pedido una legislación más estricta que prohíba o imponga restricciones a los pit bull como animales de compañía en Sudáfrica.
Cape Times
Comentario: Detalles de los otros 7 ataques: