
© Museo SmithsonianoLa aguamarina Don Pedro en el Museo Smithsoniano
Don Pedro, la joya aguamarina más grande del mundo, rescatada hace un año por una coleccionista y donada al Museo Smithsoniano en Estados Unidos, fue destacada por los organizadores de la muestra por su magnífico esplendor sin igual.
Fue encontrada en 1980 por tres mineros en Piedra Azul de Minas Gerais, Brasil. Al descubrir la pieza se cayó accidentalmente y se fragmentó en 3 trozos. Dos de estos fueron destacados por tener colores excepcionales, y fueron seleccionados para ser cortados y tallados como gemas, para ser luego venderlas. La pieza original medía unos dos tercios de metro
"La pieza más fina y más grande se salvó y se transformó en lo que ahora se conoce como la Aguamarina Don Pedro", dijo el Museo.