En lo
oscurito,
planchado y a espaldas de la sociedad, así se es como se gesta desde hace dos años —junio de 2013— el Tratado Trasatlántico de Comercio e Inversiones (el TTIP), por
lobistas de Estados Unidos de América y
cabilderos de la Unión Europea, como los muchos tratados comerciales
tramposos que se han firmado entre países desde los tiempos
oscuros del reinado neoliberal.
Apenas el pasado sábado hubo manifestaciones de protesta en 45 países europeos contra el también llamado "Tratado USA-UE", porque la voz ciudadana augura que les espera un futuro similar al saldo del TLCAN, el acuerdo entre EUA-Canadá-México, donde tanto ciudadanos como trabajadores obtienen cero beneficio. Peor aún, saben que las multinacionales beneficiadas atentan contra las legislaciones nacionales en materias como: el medio ambiente, la salud, la seguridad alimentaria, entre otras.
La convocatoria fue, en el "Día de Acción Global", 18 de abril, para "generar conciencia" sobre acuerdos similares en otras partes de mundo (como TTIP, TPP, TISA y CETA) que resultan guiados por la misma agenda desreguladora y liberalizadora, por lo que se convoca con el "fin de parar el acuerdo de libre comercio e inversiones y promover una economía que funcione para las personas y el medio ambiente". (
https://www.globaltradeday.org/).
"A lo largo de las últimas décadas, las empresas trasnacionales y los gobiernos han impulsado tratados de libre comercio y de inversiones a espaldas de los ciudadanos, vulnerando nuestros derechos y los del medio ambiente...Entre todas y todos podemos parar los acuerdos que se están negociando y trabajar para revertir los impactos nocivos de los tratados pasados. Juntas impulsamos nuestras alternativas que se fundamentan en la primacía de los derechos humanos por encima de los privilegios y beneficios de las grandes empresas". Etcétera.
Comentario: Como lo decía George Carlin: