Cambios Planetarios
Según un reporte de la Cruz Roja Colombiana, las fuertes lluvias asociadas a la temporada invernal actual también ocasionaron hasta la fecha siete desaparecidos y 78 heridos.
A ello se añaden 325 mil 230 damnificados que corresponden a 68 mil 116 familias y 54 mil 231 viviendas dañadas y 435 destruidas totalmente, entre otras afectaciones cuantiosas en sectores como el agropecuario, aún por calcular.
En tanto, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales advirtió que la temporada lluviosa se extenderá hasta los primeros meses del venidero año, producto del fenómeno climático conocido como La Niña (enfriamiento de las aguas del Pacífico).
Colombia aún sufre las consecuencias devastadoras de la pasada temporada invernal, las más fuerte de los últimos años, con un saldo de más de 400 muertos y casi cuatro millones de damnificados.
Una espectacular erupción volcánica iluminó el cielo nocturno en el parque nacional congoleño, conocido por sus gorilas de montaña, en peligro de extinción.
Las erupciones del Monte Nyamulagira, en la República Democrática de Congo, comenzaron ya el pasado 6 de noviembre y pueden continuar durante varios meses, según los especialistas. Algo que muchos consideran que puede hacer más interesante el turismo al parque nacional.
Según fuentes del Parque Nacional de Virunga, "la última noche fue la más espectacular hasta el momento" y ahora se ha establecido un campamento a un kilómetro y medio del volcán para aquellos turistas aventureros que deseen desafiar todas las advertencias de no viajar al país en general y a la región este, en particular, que aún está plagada por milicias e insurgentes, casi diez años después de la guerra civil.
Según informó hoy el Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS, por su sigla en inglés), Un terremoto de 5,7 grados de magnitud en la escala de Richter sacudió hoy la costa de Ecuador. Hasta el momento, no hay alerta de Tsunami.
El terremoto se produjo a las 1.57 GMT en la longitud 1,77 grados Sur y longitud 81,55 grados Oeste.
El foco del sismo tuvo una profundidad de 29,8 kilómetros, fuera de la costa ecuatoriana, a 129 kilómetros al suroeste de Manta, a 188 kilómetros oeste-noroeste de Guayaquil y a 380 kilómetros oeste-suroeste de Quito, la capital del país.
El epicentro se localizó cerca del pueblo de Mollakasim, a unos 30 kilómetros al noroeste de la capital provincial Van. Según las primeras informaciones, no hubo víctimas ni daños importantes.
En un terremoto de magnitud 7,2, ocurrido el 23 de octubre, murieron más de 600 personas. El miércoles de la semana pasada, un movimiento telúrico de magnitud 5,6 dejó al menos 39 muertos.
A pesar de lo espectacular de la erupción, lanza lava a 200 metros de altura, los expertos aseguran que no supone ningún riesgo para los habitantes de la zona, ni tampoco para los gorilas de su famoso parque natural.
Los expertos esperan que la erupción continúe durante días o incluso semanas para deliete de los amantes de este fenómeno natural. La última erupción del Nyamulagira se registró en enero de 2010.
En estos momentos hay alerta naranja en los departamentos Santander, Antioquia, Caldas, Cauca, Cundinamarca, Valle del Cauca, Nariño y Chocó.
Así mismo, alerta amarilla por este evento natural en Norte de Santander, Casanare y Boyacá.
De otra parte se presenta alerta roja por precipitaciones en las riberas del Río Magdalena, en el sector comprendido entre San Pablo, departamento de Bolívar y El Banco, Magdalena.
El delta del Mekong, en el sur del país, es la parte más afectada por el desastre natural. Allí la cifra de fallecidos asciende a 78 personas, según el Gobierno. Asimismo, según reporta la ONU, 65 de esas víctimas son niños menores de 16 años.
En la provincia central de Quang Nam se han registrado al menos 17 víctimas mortales. Según el Departamento de Gestión de Desastres, se vieron obligados a evacuar a 25.000 personas de las zonas inundadas.
Enormes cantidades de agua dañaron casi 200.000 casas, 26.000 hectáreas de arrozales y causaron pérdidas evaluadas en 100 millones de dólares.
Los canales de aguas del suroriente resultaron desbordados y eso ha provocó inundaciones en sectores aledaños a la autopista Simón Bolívar.
En Petecuy un centenas de viviendas sufren inundaciones.
Las autoridades indicaron que en medio de las vías anegadas quedaron carros varados en la avenida Roosevelt y la autopista Sur, donde es crítico el paso por la carrera 66. También se registraron algunos tropiezos para el tránsito particular en la calle Quinta. El MÍO no tuvo contingencias.
Sinaproc confirmó que el temporal dejó hasta el momento un saldo aproximado de 200 familias damnificadas en varios corregimientos de la provincia.
Dijo que los sectores más afectados son los corregimientos de Cativá y Sabanitas, donde se encuentra el mayor número de damnificados. Informó, además, que la vía Transísmica sigue obstruida, tras el deslave ocurrido en el sector de Quebrada Ancha la noche del martes.
Agregó que los caudales de los ríos de los distritos de costa arriba y costa abajo de Colón, se encuentran a su máximo nivel. El alcalde Dámaso García, y el gobernador de la provincia, Pedro Ríos, solicitaron a los padres de familia no enviar a sus hijos a los colegios.
Las riadas han provocado daños severos a más de dos millones de tailandeses, así como más de 200 mil aguardan evacuados en 25 de las 76 provincias del país, constató un informe del Bangkok Post.
Un comunicado del Ministerio de Sanidad alertó que a diario se reportan 200 nuevos casos de diarrea y las infecciones por hongos y otras enfermedades a causa de las aguas contaminadas que se extienden en los refugios.
Las aguas infectadas avanzan hacia el corazón financiero de esta capital y ya alcanzaron al área de Chatuchak, lo cual ha propiciado el cierre de la estación del tren elevado del extremo norte de la línea.