La temporada de monzones en China ha sido catastrófica hasta ahora, las fuertes inundaciones sin precedentes se han cobrado un alto precio. Las regiones del suroeste y el centro de la cuenca del río Yangtze han sido testigos de las mayores precipitaciones de los últimos 1.000 años, y el agua sigue cayendo sin descanso.
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En todo Henan, las lluvias anegaron 1.700 granjas a gran escala, matando a más de un millón de animales que para muchos pequeños agricultores siguen desempeñando un papel importante en la producción de carne. Las inundaciones también provocaron una gran explosión en una unidad de aleación de aluminio en el centro de Henan.
Al menos 14 personas perdieron la vida en la ciudad de Zhengzhou al inundarse su tren subterráneo. Más de 500 personas quedaron atrapadas en el metro en una de las zonas más afectadas de la ciudad.
El mayor río de China, el Yangtze, y varios de sus afluentes han subido a niveles peligrosos tras días de fuertes lluvias, obligando a evacuar a miles de personas y provocando una alerta de respuesta de emergencia sin precedentes.
Una gravísima rotura de una doble presa de tierra envió 46 millones de metros cúbicos de agua a la zona de Hulunbuir, en Mongolia Interior, provocando una inundación masiva.
La presa de las Tres Gargantas ha logrado contener las fuertes inundaciones, lo que ha aliviado a las autoridades chinas, ya que un colapso podría haber tenido un impacto aún más catastrófico en la zona.
Las graves inundaciones provocadas por las lluvias históricas causaron estragos en toda Europa occidental y se cobraron la vida de 189 personas. Decenas de miles de personas no pudieron regresar a sus hogares y se quedaron sin acceso a la electricidad y al agua potable. Las ciudades de los valles fluviales y las llanuras bajas de Alemania, Países Bajos, Bélgica, Francia y Austria sufrieron graves daños. En la mayoría de las zonas afectadas no había llovido tanto en 100 años.
La sequía y el calor extremo desencadenaron los dos mayores incendios forestales del oeste de Estados Unidos. Los incendios han quemado terrenos casi del tamaño de Nueva York, Los Ángeles y Chicago juntos.
El incendio de Dixie, en California, ha quemado 241.000 acres y ha destruido más de 60 casas. Los extensos incendios han obligado a evacuar a más de 7.800 residentes.
El incendio de Bootleg sigue causando estragos en el sur de Oregón, donde ha quemado 413.000 acres desde que se inició este mes. El fuego ha arrasado más de 400 casas.
Los bomberos griegos se enfrentaron a condiciones peligrosas y sin precedentes en la lucha contra 154 incendios forestales en Atenas, uno de los cuales amenazaba el parque nacional del monte Parnitha, uno de los últimos bosques importantes cerca de la ciudad. Mientras tanto, en Turquía, ocho personas murieron en el peor incendio del país en décadas, que arrasó franjas de la costa sur.
El clima caluroso y los fuertes vientos alimentaron múltiples incendios forestales en Akkar, Líbano, consumiendo los emblemáticos bosques de pinos libaneses. Las llamas obligaron a evacuar a miles de personas.
Y en el hemisferio sur, Brasil, Argentina y Uruguay registraron raras tormentas de nieve y temperaturas sorprendentemente frías este invierno.
Un terremoto de magnitud 8,2 sacudió Chignik, Alaska, este mes, se ha registrado como el más potente de Estados Unidos en medio siglo. Varias comunidades costeras de Alaska fueron evacuadas tras el seísmo, pero no se registraron daños importantes debido a la remota ubicación y profundidad del epicentro.
¿Ha notado que cada vez más personas, ganado, edificios y árboles son alcanzados por los rayos? Las cosas se están cargando en las capas más altas de la atmósfera. Mantén los ojos abiertos y prepárate en consecuencia.
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