Los pescadores encontraron en el espejo miles de animales muertos debido a la contaminación que provocó un bejuco, explicaron expertos.
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Honduras. Sumamente preocupados se encuentran los pobladores y pescadores de la comunidad garífuna de Miami y del sector de Barra Vieja en Tela, por la mortandad de peces en la laguna Los Micos.

Según Benito Guzmán Avilez, pescador de Miami, este es un fenómeno cíclico que se da entre tres a cuatro años, pero hace mucho que no se había repetido. "Considero que la última vez que sucedió fue hace unos diez años".

Los pescadores de la zona se reunieron para analizar esta problemática. "Esto nos preocupa demasiado, ya que nosotros vivimos de la pesca. Sabemos que no todo el pez se muere, esto afecta al más pequeño y hasta cierto tamaño (mediano); sin embargo, tendremos que esperar, ya que por la gran cantidad de peces muertos no se pueden retirar del agua".
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Los pecadores aseguran que son millares los que han muerto. "La putrefacción contamina la laguna, los peces grandes buscan salir al mar por la barra o por los lugares más limpios y puros donde no esté contaminado para salvarse".

De momento la pesca está suspendida. Solo pueden hacerlo quienes tienen lancha con buen motor y equipo para meterse al mar. "Los que solo tenemos canoa y equipo común tendremos que conformarnos con esperar", lamentó Benítez.

Los pobladores de la comunidad de Miami notificaron sobre el caso a las autoridades de Digepesca (Dirección General de Pesca), quienes se hicieron presentes al lugar entre la Laguna Los Micos y la Barra frente al mar. Debido a que no tienen el equipo y la logística necesaria se limitaron a observar el fenómeno y a tomar muestras que las aguas han dejado sobre la ribera de la laguna.

Edgardo Rivera Hernández, técnico de Digepesca, explicó que aunque los pobladores manifiestan que este fenómeno hace mucho no se daba, es un proceso cíclico de cada tres años. "A partir de las muestras que ya colectamos y a la forma en que se presenta el agua en la ribera de la laguna, es producido por una plata semiacuática".

Esta planta crece junto a los manglares en las riberas de esta zona lagunar, de ella pende un bejuco denominado pate, normalmente no llega hasta al agua, aunque a veces roza las mismas pero en menor cantidad. "Lo que ha sucedido en esta ocasión es que la noche del 4 de Octubre llovió muy fuerte, sobre todo en la montaña de la cordillera Nombre de Dios y eso ha provocado el contacto directo del agua con el pate".

El técnico explicó que lo anterior es causa del crecimiento de los cuatro afluentes que caen a la Laguna de Los Micos, lo hace que el nivel de las aguas de la misma subaconsiderablemente. "Cuando esto sucede el contacto con el bejuco es en mayor cantidad. El mismo suelta un líquido que contamina las aguas y cuando esto se da en gran proporción afecta sobretodo a las especies pequeñas y medianas".

Las especies más afectadas son sardinas, lisa, currinche, copetonas y jaibas; sin embargo, a la orilla de la laguna se encontró una raya muerta.

Según los técnicos de Digpesca, ademas del bejuco pate, la laguna no está recibiendo suficiente oxigenación, por lo que llevará varios días su recuperación y el equilibrio ecológico de la vida acuática.