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Cada vez sabemos más y más sobre la esquizofrenia, y eso por supuesto son buenas noticias. Hace relativamente poco ya os hablamos de cómo la marihuana puede producir esquizofrenia y trastorno paranoide, además de las similitudes entre no dormir y los síntomas de la esquizofrenia. Pero hoy hablaremos de una droga que no solo es legal, sino que es de las más utilizadas del planeta: El tabaco.

El tabaco y la esquizofrenia

Sabemos que la esquizofrenia tiene un gran componente genético, pero por lo visto algunos factores ambientales pueden contribuir sobremanera a su expresión clínica. Al menos así lo afirma un reciente estudio publicado en Biological Psychiatry, donde se demostró que en los pacientes esquizofrénicos hay un menor número de receptores para la nicotina que en los pacientes sin la enfermedad. Es decir, lo que provocaría que las persona esquizofrénicas consuman más tabaco, algo que ya se sospechaba anteriormente, pues algunos pacientes parecían utilizarlo como automedicación. Ahora cobra bastante sentido.

Resulta que el consumo de tabaco aumenta estos receptores de nicotina en el cerebro, los cuales se reducen por la esquizofrenia. En el estudio, aquellos individuos con esquizofrenia que consumían más tabaco (y tenían así más receptores de nicotina) también sufrían un menor aislamiento social y poseían una mejor función cognitiva. Si, tal como suena, parece que el consumo de tabaco se asociaría a un mejor estado dentro de la enfermedad.

La relación de la nicotina con la esquizofrenia

La nicotina, molécula de sobra conocida por estar contenida en el tabaco, actúa de igual manera que un neuromensajero cerebral, la acetilcolina, que también produce su acción en los receptores nicotínicos del cerebro. Por ello, durante el estudio, los investigadores de la Universidad de Yale usaron una tomografía computarizada por emisión de fotones para cuantificar la disponibilidad de estos receptores en el tabaquismo, en las personas no fumadoras con esquizofrenia, y en el grupo de individuos sanos.

Como bien comenta la Dra. Irina Esterlis, autora del estudio y profesora de la Universidad de Yale:
Encontramos un menor número de receptores nicotínicos en los individuos con esquizofrenia. Además, este menor número de receptores se asociaba con los síntomas negativos de la esquizofrenia y con un peor rendimiento en las pruebas de función ejecutiva
Por ello, el consumo de tabaco (y de nicotina, en esencia) sería una solución a algunos de los síntomas de la esquizofrenia, ya que su consumo aumenta estos receptores nicotínicos, y acaba mejorando la enfermedad en cierta manera.
Los datos parecen sugerir que fumar puede producir beneficios clínicos para los pacientes, aumentando los receptores diana para la nicotina en el cerebro. Este hallazgo se suma a la evidencia de que la nicotina cerebral podría jugar un papel clave en el tratamiento de la esquizofrenia
Las próximas investigaciones se basaran en el desarrollo de fármacos que imiten tanto a la nicotina como a la acetilcolina, pues es posible que este sea un gran primer paso para resolver los síntomas negativos de la esquizofrenia, que hoy por hoy siguen siendo difíciles de controlar.