Los comicios acabaron en octubre último y no hay espacio para un tercer turno, resaltó el máximo representante de la CUT, Vagner Freitas, durante la concentración realizada en la ciudad de Sao Paulo, con la asistencia de 100 mil ciudadanos.
Todos los que quieren manifestarse en contra o favor del gobierno tienen espacio, pues vivimos en una democracia, subrayó al reiterar su apuesta por la defensa de la soberanía nacional y de Petrobras.
Acompañado de líderes del otro gremio, la Central de Trabajadores de Brasil (CTB), de dirigentes del Partido de los Trabajadores (PT), del Movimiento de Trabajadores Sin Tierra (MST) y de estudiantes, señaló que los actos y mítines registrados este viernes evidencian el gran respaldo a la democracia, a Petrobras y la jefa de Estado.
"No podemos vacilar. Hay en marcha una onda golpista y conservadora, interesada en aprovechar este momento (de dificultades económicas) para adueñarse del poder", alertó por su parte el presidente de la CTB, Adilson Araújo.
El líder del MST, João Pedro Stédile, dijo asimismo que Brasil atraviesa por una situación de intolerancia política, de odio, con un sector opositor que quiere abreviar el mandato presidencial.
Tras reiterar su respaldo al PT y Rousseff, afirmó que defender a Petrobras es asegurar la democracia en este país.
Con camisetas rojas -el color del PT- la muchedumbre de trabajadores, campesinos y jóvenes participó en movilizaciones en la mayoría de las principales ciudades de este país y recalcó su repudió las intenciones de la derecha de derrocar a la mandataria brasileña.
Las movilizaciones ocurrieron dos días antes de la realización de una marcha nacional convocada por agrupaciones políticas opositoras para demandar la salida del poder de la actual gobernante.
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