Una convocatoria "ciudadana" pretende sacar de nuevo a los españoles a la calle retorciendo el viejo lema de "No a la Guerra", para pedir el cese de las hostilidades en Siria. Mientras que el manifiesto de los convocantes se centra en las inocentes víctimas, se produce en él también la petición no tan inocente de un alto el fuego en Alepo, la misma posición que defienden los gobiernos imperialistas de la OTAN para aliviar la presión sobre sus aliados salafistas en el frente de la ciudad.

Se pretende utilizar a las fuerzas progresistas como tontos útiles para favorecer a los intereses imperialistas en la guerra de agresión contra el gobierno sirio, llamando ahora a que se detenga una guerra que al fin están perdiendo los imperialismos de la OTAN y Arabia Saudí.
#NoALaGuerraSiria
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No son tiempos para el "No a la Guerra". En nombre de un humanitarismo vacío no se puede ignorar las complejidades de un conflicto, y mucho menos equiparar a los bandos en liza.

Desde finales de noviembre, los avances del gobierno sirio ayudado por Rusia en la estratégica ciudad de Alepo han sido espectaculares, recuperando casi el 70% del territorio que se encontraba en manos de los yihadistas financiados por Arabia Saudí y Qatar y armados por los EEUU para destrozar Siria. Queda apenas un bolsillo de resistencia yihadista sin líneas de abastecimiento, para cuya reorganización se pide un alto el fuego desde occidente: Ya que si la ciudad de Alepo cae finalmente en manos del gobierno sirio, la guerra estará prácticamente decidida.


Comentario: Aunque será una victoria importante, no estamos tan seguros que con la liberación de Alepo la guerra en Siria esté prácticamente decidida:
"La gente que sufre en toda Alepo y el resto de Siria está animando el avance y espera con la respiración contenida a que la liberación se realice finalmente. Dudo en afirmar que sea esto un punto crucial, ya que las intensas batallas continúan en otros lugares, y recuperar Alepo sólo hará que los patrocinadores del terrorismo intensifiquen sus esfuerzos en otros lugares. La partición de Siria y el control a través del caos planeado sigue siendo la agenda.

Los esfuerzos de las fuerzas sirias, las fuerzas aeroespaciales rusas, el Hezbollah, las fuerzas iraníes y las milicias palestinas han liberado a más de 90.000 personas del poder del terror en los últimos días. Las personas que fueron retenidas como rehenes humanos ahora están libres por primera vez en más de cuatro años; contrariamente a lo que nos dijeron repetidamente los medios de comunicación occidentales, de que estaban siendo bombardeados sin piedad y deliberadamente por Assad y Rusia.

A estas personas se les ha proporcionado un alivio muy necesario. Comida, asistencia médica, un espacio seguro, todo entregado con una mano amiga y una sonrisa amistosa. Contraste esto con los gobiernos occidentales retorciéndose las manos, ocultando su desprecio por los sirios detrás de ostentosos despliegues de falsa preocupación.

Rusia ha entregado más de 150 toneladas de ayuda humanitaria a los residentes de las zonas de Alepo esta semana, dijo el domingo el ejército ruso. Los quejumbrosos del Reino Unido que acusan a Rusia de obstaculizar la ayuda humanitaria no han entregado siquiera una manta, una píldora o un biberón. Y ciertamente no ha faltado un dólar cuando se trata de financiar a su activo de propaganda, los Cascos Blancos." (Leer Enfoque SOTT completo aquí)

Mientras esto sucede, la propaganda en la "prensa libre" al servicio de la OTAN ha llenado nuestros telediarios de crudas imágenes con las que se pretende despertar nuestra sensibilidad hacia las "víctimas civiles", de cara a buscar la presión popular hacia un alto el fuego que ayude al yihadismo. Una guerra que fue ignorada durante 5 años, en los que se pregonó la existencia de unos "rebeldes moderados" que nunca existieron, llena ahora los espacios informativos a través de una elaborada propaganda mientras se sigue llamando "rebeldes" o "insurgentes" a los militantes de Al-Nusra/Al-Qaeda, la misma organización que fue responsable de los atentados de Atocha el 11 de Marzo de 2004.


A medida que el ejército sirio entra en zonas de Alepo, está abriendo pasillos para que los civiles que se encuentran en la zona en que se combate puedan escapar de la zona bajo la sharía a las controladas por el gobierno. Como fue grabado en este vídeo en Alepo, los yihadistas disparan a los civiles que huyen de las zonas de guerra:

La mayor parte de reportes de muertes de civiles se producen a partir de dos fuentes. Una de ellas, el OSDH (Observatorio Sirio de los Derechos Humanos) está dirigida por un sirio musulmán suní que vive en Coventry (Inglaterra) y dice tener una red de informadores sobre el terreno que nadie conoce. La otra son los "Cascos Blancos", un grupo yihadista sirio que se viste de ONG y acompaña a los militantes extremistas sobre el terreno. Sus componentes han sido fotografiados numerosas veces armados, así como falsificando rescates de víctimas de bombardeos:


Estas fuentes de información que trabajan para el bando yihadista, son el origen de la mayoría de las imágenes e información sin contrastar que se nos muestran en los telediarios para tratar de sensibilizarnos con el yihadismo salafista que apoya la OTAN.

¿Quién es quién en el conflicto sirio?

A grandes rasgos podemos dividir la guerra siria en cuatro bandos. El gobierno legítimo de Siria se encuentra aliado con los kurdos, y en su contra tenemos por un lado al ISIS -que ocupa el Este desértico del país- y por otro una variedad de grupos mayoritariamente yihadistas cuyo jugador clave es Al-Nusra (antigua Al-Qaeda) y entre quienes Occidente trata desesperadamente de encontrar a alguien a quien adjudicar la etiqueta de "moderado".

Tales grupos yihadistas son los que han recibido durante estos años de guerra material militar por parte de EEUU así como financiación de Arabia Saudí y Qatar. De Arabia Saudí proceden además buena parte de los mercenarios que componen el ejército "rebelde".

Tras varios años de guerra, hemos llegado a un punto en el que los yihadistas que se disputan el Oeste de Siria con el gobierno están siendo finalmente derrotados, gracias entre otras cosas a la ayuda rusa que el gobierno legítimo sirio ha solicitado. Siendo estos yihadistas armados y financiados por la entente OTAN-Arabia Saudí, cada avance del gobierno sirio en el frente es coordinado en nuestros "medios libres" de comunicación con un aumento de la propaganda contra Rusia y Al-Assad utilizando a las víctimas civiles del conflicto y fabricándolas cuando no las hay.

En su última desvergüenza, fue la España lacaya de EEUU y Alemania quien presentó junto a Egipto y Nueva Zelanda una resolución a principios de diciembre para buscar un alto el fuego en Alepo, que daría un balón de oxígeno a los combatientes de extrema derecha islámica que resisten en la ciudad:
mapa alepo
(rojo - Gobierno de Siria, verde - Al-Nusra y yihadistas, amarillo - control kurdo)

Es por todo esto que resulta vergonzoso y contraproducente desenterrar el "No a la Guerra", precisamente en el momento en que está ganando la guerra el gobierno atacado por milicianos terroristas financiados y armados por el imperialismo occidental.

Pedir ahora por "la paz", pretender adoptar una posición neutral en una guerra imperialista destinada a la destrucción de un país, tratar a todos los bandos por igual en nombre de las víctimas civiles, puede tener buenas intenciones, pero en estas circunstancias no es más que cooperar con el juego de las potencias imperialistas occidentales que han provocado esta guerra, tratando de pararla cuando deja de ir como le conviene a la OTAN.