Los científicos han descubierto que el meteorito de Wedderburn, encontrado en 1951 al lado de una carretera remota en una pequeña ciudad australiana, todavía contiene sorprendentes secretos.
Se confirman el hallazgo de un raro mineral nunca antes encontrado en la naturaleza
© CC BY 4.0 / Museums Victoria
En un estudio liderado por Chi Ma, mineralogista del Instituto de Tecnología de California, los científicos analizaron la roca de 210 gramos y constataron en ella la primera ocurrencia natural de edscottite: una forma rara de mineral de carburo de hierro que nunca se había encontrado en la naturaleza anteriormente.

El descubrimiento de edscottite — así bautizado en honor al experto en meteoritos y cosmoquímico Edward Scott de la Universidad de Hawái — es significativo para la ciencia porque hasta el momento no se sabía si esta distintiva formación atómica del carburo de hierro ocurría naturalmente. La versión sintética del mineral, sin embargo, se conoce desde hace décadas, ya que es producido durante la fundición de hierro.

No se sabe a ciencia cierta cómo esta roca con edscottite natural en su composición terminó a las afueras de ciudad rural de Wedderburn, pero según el científico planetario Geoffrey Bonning de la Universidad Nacional de Australia, el mineral podría haberse formado en el núcleo calentado y presurizado de un antiguo planeta.

Los científicos creen que hace millones de años, este planeta productor de edscottite puede haber sufrido algún tipo de colisión cósmica colosal con otro planeta, luna, o asteroide. Tras su destrucción, los fragmentos de este mundo destruido fueron lanzados por el universo a través del tiempo y espacio y terminaron aterrizando, por casualidad, en las afueras de la ciudad australiana.