Violatoria de derechos humanos, la pobreza en México es un flagelo insuperable. Las cifras oficiales muestran que hay 28 millones de personas sin acceso a la alimentación, la mayoría en el sector rural y de origen indígena. El saldo del calderonismo: 81 millones de personas que padecen por lo menos una carencia: salud, educación, vivienda o seguridad social.
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El gobierno del expresidente Felipe Calderón Hinojosa dejó un saldo negativo en materia de combate a la pobreza: si se habla de atención a zonas prioritarias, los números llegan a más de 800 municipios; pobres extremos, 11.7 millones de personas; pobres moderados, 52 millones; sin acceso a la alimentación, 28 millones de mexicanos, y 81 millones de personas con al menos una carencia social.
Al margen de los discursos oficiales que hablaron de "vivir mejor", mientras que los índices de desarrollo humano en 2007 indicaban que había 11 municipios en el país en condiciones de vida similares a los del África Subsahariana, a finales del mandato calderonista se reportaron 125 ayuntamientos en esa situación de vulnerabilidad.