El 19 de enero, un reportaje conjunto de The Intercept y The Nation hizo pública una colección de correos electrónicos sin editar entre Anthony Fauci, el recientemente retirado director de los Institutos Nacionales de Salud Francis Collins, y un selecto grupo de virólogos, en los que el grupo discute la posibilidad de que el SARS-CoV-2 se originara en un laboratorio - específicamente, el Instituto de Virología de Wuhan en China.
El gancho del reportaje del periodista de investigación Jimmy Tobias, más allá de su esclarecedor alijo de documentos, es su observación de que tres de esos virólogos llegaron a publicar el 21 de marzo de 2020 un artículo en Nature Medicine titulado "The proximal origins of SARS-CoV-2", en el que los autores afirmaban: "No creemos que ninguna hipótesis basada en un laboratorio sea plausible". Los correos electrónicos desenterrados por Tobias, sin embargo, muestran una visión mucho más conflictiva entre bastidores, con uno de los autores principales del artículo escribiendo en un correo electrónico al grupo el 8 de febrero de 2020:
"Creo que publicar algo que aún no está claro podría ser contraproducente en este momento".No obstante, el artículo tuvo una buena acogida institucional un mes después. Fauci lo respaldó en una rueda de prensa en abril; Collins escribió una entrada en su blog para promocionarlo; ABC News publicó un reportaje en el que utilizaba las conclusiones del estudio para descartar las conjeturas sobre el origen en el laboratorio como teorías conspirativas. Ahora es uno de los artículos científicos más leídos de la historia y ha sido citado más de 2.700 veces.
Ya sea producto del cinismo o del mero pánico, este episodio sirve como recordatorio -en un momento en el que parecemos cautelosamente dispuestos a reevaluar nuestra respuesta a la pandemia- de cuánto poder tenía un pequeño número de científicos sobre la dirección de nuestras primeras conversaciones sobre COVID. En este sentido, se hace eco de la historia del Dr. Jay Bhattacharya, de Stanford, que acaba de escribir dos ensayos para Tablet y el National Post instando a que no olvidemos algunos de nuestros errores más graves en la pandemia.
Comentario: La posición estadounidense no son noticias para quienes llevan prestando atención por algún tiempo, pero sí es de resaltar cuando se expresan de manera tan abierta a favor de mantener a Israel completamente inmune luego de sus crímenes de guerra.